la suerte suprema

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Pepe Bienvenida / La suerte suprema

viernes, 20 de septiembre de 2013

SOBRE CATALUÑA / Por José Antonio Primo de Rivera (1934)



"...Nosotros amamos a Cataluña por española, y porque amamos a Cataluña la queremos más española cada vez, como al país vasco, como a las demás regiones..."

SOBRE CATALUÑA
(Discurso pronunciado en el Parlamento el 4 de enero de 1934)

El señor PRIMO DE RIVERA:

Este diputado, que no pertenece a ninguna minoría, se cree, por lo mismo, con voz más libre para recabar para sí, y se atrevería a pensar que para todos, esta fiducia: la de cuando nosotros empleamos el nombre de España, y conste que yo no me he unido a ningún grito, hay algo dentro de nosotros que se mueve muy por encima del deseo de agraviar a un régimen y muy por encima del deseo de agraviar a una tierra tan noble, tan grande, tan ilustre y tan querida como la tierra de Cataluña. Yo quisiera que el señor presidente y quisiera que la Cámara separase, si es que admite que alguien faltó a eso, a los que, cuando pasamos por esa coyuntura, pensamos como siempre, sin reservas mentales, en España y nada más que en España; porque España es más que una forma constitucional; porque España es más que una circunstancia histórica; porque España no puede ser nunca nada que se oponga al conjunto de sus tierras y cada una de esas tierras.

Yo me alegro, en medio de todo ese desorden, de que se haya planteado de soslayo el problema de Cataluña, para que no pase de hoy el afirmar que si alguien está de acuerdo conmigo, en la Cámara o fuera de la Cámara, ha de sentir que Cataluña, la tierra de Cataluña, tiene que ser tratada desde ahora y para siempre con un amor, con una consideración, con un entendimiento que no recibió en todas las discusiones. Porque cuando en esta misma Cámara y cuando fuera de esta Cámara se planteó en diversas ocasiones el problema de la unidad de España, se mezcló con la noble defensa de la unidad de España una serie de pequeños agravios a Cataluña, una serie de exasperaciones en lo menor, que no eran otra cosa que un separatismo fomentado desde este lado del Ebro.

Nosotros amamos a Cataluña por española, y porque amamos a Cataluña la queremos más española cada vez, como al país vasco, como a las demás regiones. Simplemente por eso porque nosotros entendemos que una nación no es meramente el atractivo de la tierra donde nacimos, no es esa emoción directa y sentimental que sentimos todos en la proximidad de nuestro terruño, sino, que una nación es una unidad en lo universal, es el grado a que se remonta un pueblo cuando cumple un destino universal en la Historia. Por eso, porque España cumplió sus destinos universales cuando estuvieron juntos todos sus pueblos, porque España fue nación hacia fuera, que es como se es de veras nación, cuando los almirantes vascos recorrían los mares del mundo en las naves de Castilla, cuando los catalanes admirables conquistaban el Mediterráneo unidos en naves de Aragón, porque nosotros entendemos eso así, queremos que todos los pueblos de España sientan, no ya el patriotismo elemental con que nos tira la tierra, sino el patriotismo' de la misión, el patriotismo de lo trascendental, el patriotismo de la gran España.

Yo aseguro al señor presidente, yo aseguro a la Cámara, que creo que todos pensamos sólo en esa España grande cuando la vitoreamos o cuando la echamos de menos en algunas conmemoraciones. Si alguien hubiese gritado muera Cataluña, no sólo hubiera cometido una tremenda incorrección, sino que hubiera cometido un crimen contra España, y no sería digno de sentarse nunca entre españoles. Todos los que sienten a España dicen viva Cataluña y vivan todas las tierras hermanas en esta admirable misión, indestructible y gloriosa, que nos legaron varios siglos de esfuerzo con el nombre de España. (Aplausos.)
***
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8 comentarios:

  1. El ejemplo de José Antonio y su mensaje sigue vivo.
    Mucha falta haría en estos momentos tristes para la Patria, hombres de la talla del caído por una España, Grande y Libre.
    A su lado la valoración de los gobernantes que asolan España daría auténtico sonrojo.

    Que Dios nos ampare.

    José Peroabad

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  2. Con el respeto que me merecen todos los muertos, en este último amanecer del verano 2013, intentare escribir el punto de vista humano de la figura de José Antonio Primo de Rivera, pero tendré que hacerlo en varios comentarios debido a la amplitud de este hombre tan destacado y que fue un gran caído por su amor a la patria y poder hacer de ella una España, Grande Y Libre.

    Primer comentario:
    José Antonio es uno de tantos personajes trágicos que pueblan la época de la Guerra Civil Española. En vida, eligió el camino menos fácil para capear los obstáculos que se presentaban; probablemente creyendo que era su misión al modo de monje-soldado. Renunció no pocas veces a privilegios que podía permitirse y no dudó en compartir las desdichas de sus camaradas falangistas. De ahí, la fidelidad y amistad de estos últimos.

    Sus detractores, tanto a la derecha como a la izquierda, siempre le consideraron peligroso. Aunque Falange Española y de las JONS no tenía apoyo popular alguno o mínimo, sabían que podía capitanear una minoría vanguardista revolucionaria que se hiciera con el poder. Y eso era temible para la supervivencia de ambas facciones.

    Por mucho que se quiera insistir, José Antonio desde la cárcel (sobre todo desde Alicante), carecía de información fidedigna y fiel de la realidad española y de la Guerra. Vivía de supuestos y rumores, teorizando con una Falange con más efectivos de los que realmente tenía. Todo lo que hacía, quizás, era tirarse faroles para dilatar su proceso judicial en el tiempo y por qué no, su misma vida y la de sus familiares.

    ¿Se equivocó José Antonio?.
    Curiosamente, se acabó convirtiendo en algo que no quería ser: mártir de una causa que, además, no era totalmente suya. Achacamos a su juventud y a su breve experiencia política, su falta de pericia para ver lo que se sobrevenía. José Antonio, independientemente de sus ideales, jugaba de cara y con honor. El resto eran tahúres profesionales y tramposos de gran raigambre. Una Guerra Civil no se gesta porque todos son buenos. Es decir, José Antonio era bienintencionado aunque posiblemente equivocado. Nadie se preocupó de sacarle de sus errores y sí de sumir a España en una mayor confusión. De este modo, José Antonio se mantuvo aún más firme y más claro en sus posturas. Éstas, por lo convulsa de la situación española, aspiraban a una solución total. Por eso su jugueteo con los totalitarismos.

    Si José Antonio portaba armas era porque había sufrido atentados contra su persona (de hecho, Calvo Sotelo fue tiroteado y muerto, con lo que no era ajeno a sucesos de ese tipo). Su arresto y juicio, con la victoria electoral del Frente Popular, estaba prácticamente decidido. La valentía de mantenerse en Madrid en esas fechas era un riesgo innecesario para su persona.

    García Lorca.
    Un episodio poco conocido de José Antonio es que mantenía una buena amistad con el poeta Federico García Lorca. Hay quien habla de una relación homosexual entre ambos, aunque este hecho no está comprobado.

    Miguel Ángel Góngora

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  3. Segundo comentario:

    Franco y el franquismo.
    José Antonio y Franco eran dos polos opuestos. El primero era un idealista y el segundo un pragmático. Franco no dudó en utilizar la ideología joseantoniana para sus propósitos, fueran éstos bondadosos o perversos. Falange Española y de las JONS se unió a los Tradicionalistas bajo el mandato de Franco (FET y de las JONS), que lo único que compartían era su antimarxismo.

    Muerto José Antonio, Falange quedó sin su ideólogo y líder fundamental; con lo cual se puede decir que la Falange franquista es descafeinada y plegada a otra figura como era Franco.

    Hay que tener en cuenta que José Antonio muere a los 33 años, muy joven; siendo un político que se está haciendo todavía.

    Franco se desentiende de José Antonio y no hace caso de sus cartas o mensajes. Su relación nunca fue cordial. Franco siempre fue un militar y el Ejército su piedra angular. José Antonio -respetando al Ejército- siempre pensó en la sociedad civil y de Derecho (como su base intelectual legal). Y si algo logró la Falange en el franquismo (bien o mal) fue precisamente que se aplicaran ciertos principios legales y civiles (muy paternalistas pero no malintencionados).

    Gran parte de la visión de José Antonio nos llega por parte del franquismo, que suele ser un punto de vista reducido y simple, poco profundo. Como mártir de la causa franquista se le asocia a la persona de Franco y su Dictadura, pero hay que realizar copiosos y agudos matices.

    José Antonio, por ejemplo, no rechazaba la República como fórmula de gobierno; cosa que sí hizo Franco. Lo que rechazaba José Antonio es que la República fuera bananera y/o marxista. Y entonces daba igual que hubiese Monarquía o República. José Antonio, asimismo, tenía una ideología y un contenido, Franco se lo iba poniendo a tenor de que fuera pasando el tiempo. De este modo es distinto el nacional-sindicalismo al nacional-catolicismo. Así son diferentes los lemas: Pan, Patria y Justicia a Dios, Patria y Justicia.

    José Antonio mantuvo amplios contactos con el anarcosindicalismo. Franco los vió siempre como enemigos de España.

    Revolución y violencia.
    José Antonio estaba inspirado en el fascismo italiano y en la obra de George Sorel. Aspiraba a una vía social del Estado no marxista, de clara inspiración patriótica española. Su ensalzamiento de los valores cristianos y españoles y su elevamiento a un destino trascendental en lo universal, lo lleva al paroxismo político y a un irracionalismo filosófico. En su lírica, la juventud española se agrupa fraternalmente bajo el yugo y las flechas que conmemoran la unión nacional de los Reyes Católicos.

    Sin embargo, toda esa poesía se ve desbordada por los hechos prebélicos anteriores a 1936. Muchos ven a la Falange como una organización de choque con la que fustigar a las organizaciones obreras de izquierdas. Éstas últimas, precisamente creen que está pergeñada para tal fin. Los textos y discursos incendiarios de José Antonio, en vez de clarificar más el ambiente, hacen que cada uno los entienda como les viene en gana. El caso es que se producen muertos, calificándose irónicamente a FE como "Funeraria Española", debido a los fallecidos en dicha formación.

    Miguel Ángel Góngora

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  4. Tercer comentario:

    José Antonio, en lo que se conoce, intentó evitar represalias de sus afiliados; aunque no es menos cierto que les instó a que se defendieran en caso de ataque (como él mismo hizo en los atentados que sufrió). No cursó orden alguna de asesinato ni atentó directamente contra nadie.

    La personalidad violenta con la que le describen algunos textos es más anecdótica que un patrón de conducta. Sus discursos no eran menos exaltados que los de Largo Caballero o cualquier otro de la época, del signo que fuere. Si era, en cambio, una persona deseosa de dar ejemplo, intentando aparentar ser un hombre sin miedo aunque la misa fuera por dentro.

    Se puede decir que conspiró contra el Gobierno de IIª República (no menos que los socialistas en 1934), pero no contra la República en sí misma. Su conspiración no trataba ni versaba sobre una Guerra Civil como fue, sino sobre un golpe de efecto (o de Estado) que deviniera en un nuevo orden. No obstante, ordenó el apoyo de la Falange al Alzamiento del 18 de julio de 1936 desde la cárcel. Pero no es menos cierto que, según iba pasando el tiempo, se apresuró a escribir numerosas cartas para que cesaran las hostilidades y se permitiese un gobierno de concentración nacional. No se sabe si tales documentos los escribió con su vida entre la espalda y la pered o los elaboró con una auténtica convicción en lo que decía. Con su muerte, lo único que podemos hacer es conjeturas sobre lo que hubiera sido.

    José Antonio, en resumen, era un revolucionario que intentaba reducir la violencia a su mínima expresión; aunque, a veces, la considerara necesaria y la justificara. Tal justificación, según José Antonio, obedecía a intereses y valores más altos (como la defensa de la patria, la justicia...)

    Es muy difícil someter a la figura histórica de José Antonio a un criterio unívoco. Su vida, a partir de 1930, es cuasinovelesca. ¿Héroe o villano? Probablemente ninguna de las dos cosas. Era un hombre intelectualmente muy preparado y gran conocedor de la vida literaria y artística española. Escribía con fluidez no sólo documentos legales, sino también cantidad de artículos periodísticos, así como poemas. La calidad y los contenidos no es que fueran geniales estilísticamente, si bien pueden incluir un prurito de brillantez.

    No se puede negar que José Antonio albergó la idea fascista para España durante algún tiempo. Mas tampoco se puede hacerlo que aquel joven estaba en una búsqueda de alguna teoría que resolviera con suficiencia la totalidad de los problemas del país. Tal es así que, el influjo de los totalitarismos, no sólo le sedujo a él sino a todos los estalinistas de la época, así como una larga lista de intelectuales que después renegaron de tales ideas (y eso no fue óbice para el desarrollo posterior de sus carreras).

    Murió a la edad de 33 años. Muy joven. No puede hablarse de un legado político evolucionado porque aún estaba en una búsqueda durante una España muy conflictiva. Es decir, ni las circunstancias ni el momento acompañaron en su difusión política.

    Nunca pudo quitarse el sambenito de señorito que le habían colocado sus enemigos de la izquierda, pese a que sus sacrificios fueron mucho mayores que el de muchos que se lo llamaron. El uso de la camisa azul o el saludo de camarada en la Falange, vienen a significar a las clases trabajadoras intencionadamente. El uso de la boina roja requeté fue consignada por Franco con la unificación con los Tradicionalistas, terminada la Guerra Civil y muerto ya José Antonio.

    Miguel Ángel Góngora

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  5. Cuarto comentario:

    Los símbolos franquistas han dejado un testimonio precisamente franquista de José Antonio, a imagen y semejanza del Dictador. No obstante, existen numerosas pruebas en que ambos personajes se distancian.

    La teoría nacional-sindicalista, aunque con influencias, es netamente española. Es una fórmula política basada en el Estado Corporativista de Mussolini, con variantes de cierto interés para el estudioso. El sindicalismo falangista, en lo esencial, es muy parecido al anarcosindicalismo de la CNT. Se difiere en dos cuestiones fundamentales: a) el sentido de unidad de la patria y b) el sentido de Estado y de Gobierno. No es extraño que hubiera intercambio de afiliados antes de la guerra.

    Las dos variantes falangistas existentes en la actualidad -una con tintes franquistas y otra de corte más joseantoniano- son, en cualquier caso, testimoniales más que ideológicamente un supuesto evolucionado de las ideas fundacionales. En sí, siguen reclamando la vigencia del legado joseantoniano en las facetas que les cuadran para sus programas políticos.

    Los testimonios de aquellas personas que le llegaron a conocer, no hablan mal de José Antonio. Evidentemente se trata de amigos, aunque fueran rivales políticos (caso de Indalecio Prieto). Todo lo negativo de José Antonio, salvo algunos datos históricos incontrovertibles (cierta financiación fascista italiana de la Falange), nos llegan de enemigos que tienen conocimiento de su persona a nivel indirecto o de creencias arraigadas de que tenía que ser malo por definición, cuestión que sí es sospechosa. Es cierto que pueden existir explicaciones distintas a la presente, cuya visión de José Antonio se centre sólo en los aspectos fascistas de su figura, pero en una perspectiva más amplia ¿por qué un fascista iba a tener contactos con anarquistas, con rivales políticos de la izquierda o con personajes fuera de su ideología totalitaria? José Antonio no era un espía, pero sabemos su inquietud intelectual por conocer la realidad española. Otra cosa distinta es que José Antonio estuviera acertado en sus apreciaciones (o siempre acertado); de ahí la conveniencia de considerar si estuvo equivocado José Antonio en determinadas ocasiones.

    En otro orden de cosas, José Antonio era un líder carismático y un organizador nato, que se sabía llamado para ocupar las más altas cotas de un potencial Gobierno. Su personalidad arrolladora y su gran preparación técnico-legal, hacían sombra a otras personalidades de entonces que no lo querían ver ni de lejos. Sólo le quisieron utilizar para sus propósitos (no siempre honestos). A partir de 1935, José Antonio lidera una formación de escasa implantación popular y que no desea ser tildada ni de izquierdas ni de derechas. Está prácticamente solo y rodeado de enemigos personales y políticos; abandonando progresivamente el fascismo y buscando otras vías. Finalmente, la Guerra Civil Española (1936-1939), hubiera ocurrido con o sin José Antonio. Esta variable influyó anecdóticamente en el desencadenamiento de los acontecimientos. Sin embargo, José Antonio sí fue una variable de cohesión como mártir de la causa de las fuerzas franquistas. Pero eso es una cuestión de Franco que le interesaba que hubiera unidad en su frente, no de José Antonio que ya había fallecido.

    Miguel Ángel Góngora

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  6. Quinto comentario:

    Conclusiones.
    Resulta obvio que el discurso joseantoniano entre 1930 y 1936 ofrece sustanciales contradicciones. Sin un riguroso análisis de las circunstancias y el contexto sucesivo de los acontecimientos, no tiene ningún sentido. En principio, se presenta por las fuerzas monárquicas y conservadoras al Parlamento, para después rechazar su apoyo, unión o cualquier tipo de vinculación. Asimismo apoya la República como forma válida de Gobierno.

    En 1933 acepta la fórmula fascista y revolucionaria propuesta por las JONS, para irla deshechando, poco a poco, desde 1934 y, sobre todo, a partir de 1935.

    Pacta o no, según su criterio, con fuerzas de la derecha o de la izquierda, en acuerdos extraños o de conveniencia.

    Todo ello es debido a que su partido era minoritario y se veía obligado a una política de supervivencia. El colapso económico de Falange Española y de las JONS era una evidencia.

    Otra cosa distinta es la Falange después de la Guerra Civil y de la muerte de José Antonio.

    José Antonio fue controvertido ya en vida, no lo iba a ser menos en la Historia. Comprender lo que hizo no significa justificar todo ello. José Antonio no tuvo visión de futuro en lo que se refiere a los acontecimientos que se cernían sobre él ni sobre España. Creía que las cosas se resolverían rápidamente y no fue así. Se quiso convertir en mediador de una causa perdida y no supo ver que no representaba a nada ni a nadie en el estatus de poder de los bandos.

    Sí visionó, en cambio, el desplazamiento político que se avecinaba (del cual él formaba parte, aunque no se le quisiera como compañero de ese viaje). No esperaba que ese cambio fuera tan lento ni tan cruento. Y ni mucho menos que se convirtiera en una Dictadura de 40 años.


    Podríamos decir que nuestro personaje inició su vida política en las filas de la derecha monárquica reaccionaria y contrarrevolucionaria –en la Unión Monárquica Nacional- que agrupaba a muchos de los hombres de la que había sido el régimen de su padre, la dictadura de Primo de Rivera. Una derecha reaccionaria y contrarrevolucionaria que en términos generales le acompañaría y arroparía en su proceso de fascistización hasta la fundación misma de Falange Española en octubre de 1933 y los primeros pasos de la formación.

    Miguel Ángel Góngora

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  7. Sexto comentario:

    Volvemos de nuevo a la vida política de José Antonio Primo de Rivera.

    La Falange y su actividad política.
    José Antonio Primo de Rivera creó junto a Julio Ruiz de Alda el Movimiento Español Sindicalista, embrión de la futura Falange Española, movimiento político de carácter fascista que, como tal, nace desconfiando de los métodos democráticos e intenta imponer un Nuevo Estado de carácter totalitario y corporativo (expresado en la consigna del sindicalismo vertical). En sus puntos iniciales ya están presentes los conceptos que Primo de Rivera manejará a lo largo de su corta vida política: una España unida por un destino universal que supere la lucha de clases y los nacionalismos, la concepción de un hombre nuevo portador de valores eternos y una justicia social que proporcione al hombre una vida digna y humana; todo esto, con un sentido de catolicidad. Falange Española fue fundada en el Teatro de la Comedia de Madrid, el 29 de octubre de 1933. Dicho acto comenzó con las palabras de Primo de Rivera «Camaradas, nada de un párrafo de gracias. Escuetamente gracias, como corresponde al laconismo militar de nuestro estilo»; definiéndose acto seguido como contrario al estado liberal parlamentario y fustigando a Jean-Jacques Rousseau y su Contrato Social.

    José Antonio Primo de Rivera y la violencia.
    Primo de Rivera, en lo personal, protagonizó numerosos actos de violencia. De carácter agradable y de trato cortés, caía en accesos de ira cuando se ofendía la memoria de su padre pero inmediatamente se serenaba y disculpaba. En sus tiempos de estudiante, acabó a puñetazos numerosas discusiones y, más tarde, esa violencia la llevó a las Cortes, al Colegio de Abogados y a los cafés. En 1931 protagonizó un grave incidente al agredir al General Queipo de Llano. Queipo de Llano no se privaba de hablar despectivamente sobre el dictador Primo de Rivera (padre de José Antonio). Enterado José Antonio de alguno de esos comentarios, se presentó en compañía de uno de sus hermanos y de sus amigos en el café donde Queipo de Llano frecuentaba una tertulia, llamó su atención y sin darle tiempo a reaccionar, estando Queipo de Llano sentado, le propinó un golpe. Queipo de Llano sufrió una herida en la frente que le dejó marcado y José Antonio Primo de Rivera, que era alférez de complemento, fue expulsado del ejército por un tribunal militar. En su actividad parlamentaria, en dos ocasiones, agredió a puñetazos a dos diputados. En uno de los casos, las críticas del diputado a la dictadura de su padre sirvieron de detonante. Cuando fue juzgado por tenencia de armas, en el momento que se leyó la sentencia que lo condenaba a cinco meses de arresto, tuvo un acceso de cólera, insultó y amenazó a los magistrados; actuaba como su propio defensor y se rasgó la toga y arrojó al suelo el birrete. Un oficial del juzgado comentó: "Tan chulo como su padre", a lo que Primo de Rivera respondió propinándole un puñetazo que fue respondido por éste lanzándole un tintero que le alcanzó la frente.

    En la cárcel Modelo de Madrid, cuando se le comunicó su traslado a la de Alicante, estando encerrado en su celda, se encolerizó hasta tal punto que otros falangistas se alarmaron y, creyendo que a su líder le estaban sometiendo a malos tratos, protagonizaron un conato de motín. Primo de Rivera admitía la violencia como algo normal en las relaciones sociales y políticas.

    Y esta es parte de la vida de un hombre, ídolo para algunos, polémico para otros, pero sin lugar a dudad un gran personaje de la Historia de España.

    Al igual que todos los muertos. Más o menos relevantes. Descanse en paz.

    Saludos

    Miguel Ángel Góngora

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  8. La Fiesta y el amor a la Patria España que no falte.

    Los ultras de Blaquerra, al habla con Amanecer Dorado para copiar su éxito.

    Aspiran a presentarse en las europeas.

    El grupo de partidos que atacó el miércoles de esta semana la sede de la Generalitat de Cataluña en Madrid mantiene un fluido contacto con el ultraderechista griego Amanecer Dorado, uno de los mayores referentes actuales de la extrema derecha en el Viejo Continente. Según fuentes policiales consultadas por El Confidencial, estas formaciones unidas bajo la nueva marca política La España en Marcha (LEM), responsables del asalto al Centro Cultural Blanquerna, han tenido conversaciones en los últimos meses con sus colegas helenos para intercambiar impresiones, conocer las claves de su ascenso electoral y clonar su estrategia política en territorio español.

    LEM se creó oficiosamente el pasado 18 de julio tras la publicación de un manifiesto conjunto por parte de La Falange, Nudo Patriótico Español, Alianza Nacional, Movimiento Católico España-Acción Juvenil Española y Democracia Nacional. El objetivo de esta coalición es tratar de unir sus fuerzas para ganar presencia social. Según las fuentes consultadas, esa unidad se va a traducir en la creación de una candidatura conjunta para concurrir a las próximas elecciones europeas, en mayo de 2014.

    El ataque a la librería de Blanquerna, que interrumpió la celebración de la Diada con empujones y el lanzamiento de botes de gas pimienta y dejó un balance de cinco heridos leves y 12 detenidos, fue su primer acto de presentación en sociedad. La nueva marca aún no está inscrita en el registro oficial de partidos del Ministerio del Interior, pero sus fundadores ya habrían manifestado su intención de presentarse a los comicios al Parlamento Europeo, la cita con las urnas más propicia para este tipo de experimentos políticos por la proporcionalidad de los resultados y la baja movilización del votante medio.
    Con todo, según precisan otras fuentes, las posibilidades de que consigan participar en esa cita son remotas por las exigencias que establece la ley a todas las candidaturas: deben conseguir el aval de 50 cargos electos o en su defecto presentar 15.000 firmas de electores. Pero la penetración en las instituciones de estos cinco partidos radicales es nula y su base social difícilmente sería capaz de cumplir con la otra alternativa que ofrece la legislación.

    En general, las cinco formaciones han experimentado una profunda devaluación en los últimos años por la progresiva disolución sociológica de esta ideología y el relativo ascenso de otras coaliciones similares, en especial, España 2000, que consiguió 9.256 votos en las generales de 2011 y cuenta con cinco concejales repartidos entre la Comunidad de Madrid y la Comunidad Valenciana.

    El próximo 28 de septiembre, las juventudes de las cinco formaciones de extrema derecha tienen previsto reunirse en Madrid para celebrar una jornada de convivencia. El acto central del día será una “gran quema de trapos separatistas”, es decir, de banderas esteladas. Los militantes de LEM también se desplazarán a Barcelona el 12 de octubre para manifestarse con motivo del Día de la Fiesta Nacional.

    Víctor Ojeda

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