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Pepe Bienvenida / La suerte suprema

lunes, 20 de marzo de 2023

No es tarea baladí / por Pla Ventura

Isaac Fonseca

"...en estos días hemos podido sentir la satisfacción de comprobar que no estamos solos puesto que, aficionados de toda Hispanoamérica y de México de forma muy concreta, nos han secundado con sus vítores informáticos todo lo que dijimos sobre Isaac Fonseca, el caso más sangrante del toreo en los últimos tiempos que, como contamos, el chaval tuvo que asirse a la Copa Chenel para poder torear aunque fuera un solo festejo..."

 No es tarea baladí

Pla Ventura 
Toros de Lidia/20 marzo, 2023
Nos llegan los ecos desde distintas partes del mundo en torno a lo que son nuestras opiniones al respecto de todos los temas que abordamos sobre el mundo de los toros y, ese hecho nos motiva para seguir en la brecha. Opinar no es otra cosa que apostar y, como se sabe, todo “jugador” asume el gran riesgo de perder pero, para nuestra fortuna, siempre salimos ganadores en la gran apuesta por la verdad. 
Adornos podemos utilizar todos los que queramos pero, poner el dedo en la llaga ya es otra cuestión. Por supuesto que, en nuestra actitud, nos encontramos con partidarios y detractores porque no todo el mundo tiene razones o motivos para coincidir con nuestra opinión pero, en realidad, por todo lo que podemos saber, si notamos que la verdad siempre sale triunfadora por encima de todos los intereses creados en el mundo de los toros.

Dar una noticia, como tal, es lo más sencillo del mundo. Digamos que, en cualquier medio hemos visto y leído las ausencias de la feria de Madrid y, no han faltado a la verdad. Claro que, lo realmente sustancioso de cara al lector es el hecho de que le expliquemos los motivos por los cuales dichos diestros ausentes de dicha feria han sido ninguneados por la empresa. Abordar los asuntos taurinos, sus corruptelas, sus intereses creados y esa forma absurda con la que se trata a muchos diestros, eso es lo que le interesa al lector; cierto es que, el “denunciado” por sus actitudes en muchas casos canallescas, seguro que no brinda con champagne cuando se le descubre pero, el damnificado si siente un gran alivio al comprobar que, algunas personas, como pueda ser nuestro caso, alejados de todo interés puesto que no esperamos nada de nadie, sienten que alguien les muestra respeto y dignifica sus carreras.

No estamos solos y, la prueba, como digo, son los ecos que nos llegan sobre tantas opiniones que nosotros hemos dado, mostrado y demostrado. Es esperanzador encontrarnos con aficionados que nos secundan por completo cuando decimos que ya estamos hartos de tanta figura del toreo que, después de un cuarto de siglo en los ruedos, todavía dicen estar en su mejor momento. Y se quedan tan anchos. Oiga, señor, figura del toreo y rico en su profesión. ¿Por qué no mira usted hacia atrás y ve la larga lista de matadores de toros que todos esperan su turno, justamente el que a usted le concedieron en su día aquellos matadores que le precedieron? Está claro, las figuras actuales o son ciegos, o se hacen los tontos y, tienen razón, se lo han puesto a todos tan sencillo que, otros veinte años más los soportan todos.

Al final, como digo, nos pasamos la vida formulando denuncias por doquier, siempre, para favorecer al más débil. Y ese es el calado al que aludo por parte de los auténticos aficionados. Vivimos una época en que la tecnología ha llegado a abrumarnos pero, a su vez, la misma ha demostrado de forma fehaciente aquel dicho de antaño en que decíamos que el mundo es un pañuelo y, ahora, dicho axioma ha tomado una verdad desmesurada porque, emitimos ahora una opinión y, tres segundos más tarde es leída en cualquier parte del globo terráqueo en el que, desde el mismo, cada cual muestra su parecer pero, lo realmente cierto es que ha llegado a todos los confines del mundo. Y esos ecos son los que nos llegan y nos satisfacen puesto que, al final, nuestra labor no es tarea baladí.

Al respecto de todo lo que contamos, podríamos poner miles de ejemplos sobre la satisfacción que han sentido los aficionados al verse reflejados en nuestras líneas. Y hablo de aficionado porque el gentío no nos comprenderá nunca porque no ha faltado quién nos ha definido como “terroristas” de la pluma, una nimiedad que jamás nos ha lacerado el alma. Decía que, como ejemplo, en estos días hemos podido sentir la satisfacción de comprobar que no estamos solos puesto que, aficionados de toda Hispanoamérica y de México de forma muy concreta, nos han secundado con sus vítores informáticos todo lo que dijimos sobre Isaac Fonseca, el caso más sangrante del toreo en los últimos tiempos que, como contamos, el chaval tuvo que asirse a la Copa Chenel para poder torear aunque fuera un solo festejo.

Al final, apostar por la verdad, defenderla, hacer las denuncias pertinentes, granjearte enemigos por doquier de todos aquellos mercachifles del negocio no es nada gratificante pero, vale más el aplauso de un solo aficionado que la palmadita al hombro de aquel que, lleno de poder, con la misma, sabe que te ha comprado.



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