Otro ejemplo nefasto / por Pla Ventura

"...Convencido estoy de que Juan José Padilla no le ha “vaciado” la cartera a Perera porque, ¿qué se podía llevar el apoderado en las funciones de ayudar a un torero humilde? Ocurre que, el sistema así lo propicia, en la actualidad, los novilleros tienen que pagar por torear, digamos que tienen que financiarse la carrera, algo muy distinto a lo de otras épocas en la que, por ejemplo, Pepe Luis Vázquez Silva, de novillero se compró una finca. Eran otros tiempos y, por supuesto, otros hombres en todos los sentidos..."

Otro ejemplo nefasto

Pla Ventura

Toros de Lidia/11 marzo, 2023

Como hemos podido saber, en estos últimos días las declaraciones de Manuel Perera contra el que fuera su apoderado han sido durísimas y, como algo lógico, Juan José Padilla se ha defendido porque, como se pudo saber, Manuel Perera afiló el cuchillo buscando las femorales de Padilla. Una pena que este tipo de relaciones se acabe de este modo y, lo triste de la cuestión es que, tras cualquier ruptura, todos afirman haber quedado como “amigos”.

Yo estoy seguro que, tanto Perera como torero y Padilla en funciones de apoderado querían lo mejor, así lo delataban sus rostros en la pasada feria de Sevilla cuando el chaval se doctoró pero, en aquella aciaga tarde –y digo nefasta por el resultado- no pasó nada, absolutamente nada y ello nos ha venido a demostrar que, Juan José Padilla no podía hacer milagros. Fijémonos que, en la misma plaza, Calerito se doctoró, cortó una oreja y no toreó más. ¿Qué iba se entonces de Manuel Perera que ni siquiera escuchó una pobre ovación? Estaba clarísimo.

Los toreros, como millones de veces dije, todos esperan que se produzca el milagro que, por otra parte, rara vez llega y Manuel Perera era otro de los esperanzados al respecto. No ha podido ser pero, tampoco olvidemos que Manuel Perera es otro torerito más de los “tres mil” que tenemos en el escalafón y si no hay hueco para los triunfadores imaginemos que puede suceder con aquellos que no han triunfado.

Convencido estoy de que Juan José Padilla no le ha “vaciado” la cartera a Perera porque, ¿qué se podía llevar el apoderado en las funciones de ayudar a un torero humilde? Ocurre que, el sistema así lo propicia, en la actualidad, los novilleros tienen que pagar por torear, digamos que tienen que financiarse la carrera, algo muy distinto a lo de otras épocas en la que, por ejemplo, Pepe Luis Vázquez Silva, de novillero se compró una finca. Eran otros tiempos y, por supuesto, otros hombres en todos los sentidos.

Las declaraciones desafortunadas de Perera podría haber tenido algún sentido si el chaval hubiera toreado ochenta corridas de toros y no le hubiera quedado nada, algo que también ha sucedido muchas veces pero, en su caso, esa posibilidad está descartada; reitero, ¿qué podía llevarse Padilla de una hucha vacía?

El caso citado es otro ejemplo más de las desdichas del mundo de los toros en los que, ante todo, muchos son los llamados y pocos los elegidos y, para mayor desgracia, de los elegidos, media docena tienen el privilegio de ser figuras del toreo, un decena viven con dignidad y, el resto, hasta los “tropecientos mil” que existen, el denominador común siempre es el mismo, hambre y miseria.

Si le sirve de consuelo a Manuel Perera debemos de recordarle los motivos por los que se ha retirado del toreo López Simón, un hombre que ha salido cinco veces por la puerta grande de Madrid, ha cosechado triunfos memorables en todas las plazas del mundo y, ahora, en plena juventud, tiene que buscarse un trabajo para poder vivir. ¿Cabe escarnio más grande? Y Manuel Perera acusando a Juan José Padilla de estafador. Vamos, que no entiendo nada pero, a su vez, lo entiendo todo. Lo resumimos todo en uno de nuestros grandes axiomas. En la casa donde no hay pan, todos gritan y nadie tiene razón.