Feria de Badajoz 2012
La Fiesta “Reina por un día”
Por Pedro Cavier Cáceres
crítico taurino y periodista.
De la abundancia a la ¿ruina?
De la tempestad a la calma chicha…y el análisis.
Tras los fastos de Badajoz, la ola de calor y el tifón José Tomás la calma vuelve a los toros, su estado natural desde hace ya demasiados años. En el mismo escenario a las pocas horas: tres figuras de hoy Morante, Manzanares y Talavante llevaron media plaza en un festejo convencional que no dejará más huella que el arrebato de contenido orgullo torero que exhibió Talavante en el sexto de la tarde.
El arrebato es la excepción que no la norma.
Lo tuvo Antonio Ferrera, la víspera del huracán, extraordinario con los seis de Victorino, pero Ferrera es “clase media” y la Fiesta es clasista y sectaria por elitista.
Coraje y amor propio derrochó El Juli, en máxima figura, pero fue eso amor propio y no ajeno para frenar el vendaval mediático producido por la presencia de JT.
Triunfaron los dos, le vale al de Galapagar pero no al de Velilla para cambiar la “hoja de ruta” de ambos y subvertir tendencias.
Arrebato, coraje, amor propio; nada que ver con rivalidad y competencia, a cara de perro.
De ser el uno a ser el único y poner cada tarde, en toda una temporada, el título en juego.
Ahora en La Fiesta lo normal es la excepción y viceversa.
Lo de Badajoz es un ripio suelto al margen del soneto.
Es esa competitividad, rivalidad cada tarde, salir del “paquete básico” de ternas adocenadas y ganaderías de cabecera quizá reside el factor que pudiera dar un revulsivo a medio plazo al sector y poner bases de futuro para la supervivencia.
Pero no. Cada uno a lo suyo.
Todo fiado a hechos puntuales y como norma general a que el cuarto espada, la cuarta figura, invisible, del cartel sea el patrón de la ciudad y “vecinos”.
Pasen, lean y vean
Pasó San Juan, la tempestad por unas horas, y llegaron San Pedro y San Pablo: la calma en los ruedos hecha pesadilla en las taquillas más por los costos que por los datos objetivos de ocupación que no son malos con la que cae.
En Burgos (de menos a más, influyendo poco las sustituciones de figuras como Juli y Perera) un indicio: 63,5% de ocupación media como Soria; un 65% en Zamora y algo más bajo León (58%). Segovia en eutanasia.
Datos que ofrecen varias lecturas, además de lo urgente de ajustes en los costes:
a) Sobre el número de festejos.
Burgos con 6 lo paga en lunes y martes, alejados del 29 (San Pedro). Soria lo equilibra con 3, y entre el futbol de hoy domingo y la poca capacidad de aforo quizá le sobre 1.
Es lo que ha hecho Zamora confiada al festejo de rejones y salvar los muebles con una corrida de perfil medio.
León sigue confiando en su macro corrida de 8 toros con figuras y toreros de feria, pero ello encarece aún más el producto y apunta déficit.
Y aunque son localidades próximas y coincidentes en fechas claves (29 y sábado) la demostrada nula itinerancia de público y aficionados, ni al reclamo de figuras, hace del dato testimonial.
b) Sobre los carteles.
Echando un ratico, que resulta divertido, es elocuente el resultado de cruzar datos de asistencia, terna, coste del montaje y “el día”.
Burgos (12.000 localidades): de los 2/3 de Padilla, Castella, Talavante la antevíspera a los casi 3/4 del jueves con Ponce, Fandi y Morenito de Aranda sustituyendo a Perera (un pelotazo…para reflexionar).
San Pedro fue el “torero” de mayor tirón (80%) alternando con César Jiménez, Manzanares y Cayetano sustituyendo a El Juli (medio pelotazo…para pensar)
Y el ¡bingo! fue el sábado, más de 3/4 con El Cordobés, Paquirri y Luque, que a la postre fue el que dejó al público, en general, mejor sabor de boca con un buen encierro de Torrestrella y el saldo de 7 orejas.
Estos más de 9.000 son los que seguro vuelven en situación similar el año que viene.
Aunque quizá, paradojas de la vida, el cash menos peleado con los apoderados fueran los de los festejos teloneros pese a la media escasa del lunes y algo más el martes con Noelia Mota, César Jiménez, Morenito de Aranda, El Cid, Fandiño y David Mora.
Elocuente lo de Soria: con poco aforo (5.500) las similares entradas sobre el 70% dan rentabilidades distintas y un quebradero de cabeza a la empresa sobre conjugar la supuesta calidad de carteles sobre la optimización de recursos.
Vean: el 27 miércoles y aunque el comienzo fue a las 6 de la tarde (España-Portugal) Diego Ventura, Iván Fandiño y Rubén Sanz con corrida menor (el dato no es baladí) metieron casi la misma gente (300 boletos menos, aproximadamente) que un buen sábado sin fútbol con El Cid, Castella y Talavante.
Dos ejemplos y dos apuntes (Zamora y León) válidos para otros ciclos ya consumados (Alicante, Algeciras) y que dan una panorámica de “los mercados” y la “prima de riesgo”…de las figuras.
Lo triste que la Europa antitaurina, ni Bruselas ni Merkel, ni Dragi, obliga a reformas y ajustes.
Cuando se gasta más de lo que se tiene se va tirando, tirando…hasta llegar al borde del precipicio.
Los datos de ocupación no son buenos pero en comparación con otros sectores dentro de la crisis actual (económica y taurina) son estimables, incluso muchos de los sectores de servicio y productivo los envidiarían.
El problema (entre otros muchos es el “techo de gasto”)
¿Quién rescata a la Fiesta?
¡Claro si es que alguien lo pide!
***
No hay comentarios:
Publicar un comentario