«Desde que Roca Rey irrumpió en esta plaza, no habíamos visto nada igual». Son las palabras de algunos aficionados que, en la tarde de este 7 de septiembre, salían de la plaza de toros La Sagra de Villaseca aún soñando con el toreo que, minutos antes, el jovencísimo abulense Sergio Rodríguez acababa de sellar en el ruedo del coso toledano. La tarde a la que se referían del cóndor peruano acaeció hace siete temporadas, días antes de tomar la alternativa, cuando fue corneado por un astado de Flor de Jara y se mantuvo en el ruedo como un titán, aguantando estoico a pesar de la quemazón del pitón del novillo santacolomeño.
En la tarde de este martes, Rodríguez estuvo valiente e inteligente ante sus dos animales de Baltasar Ibán, con los que se cruzó y propuso el toreo con una verdad tremendamente absoluta. Otro descubrimiento del Alfarero. La proposición pura, el trazo de plena verdad y la forma con la que hizo el toreo metiendo riñones y cruzándose hicieron romperse al tendido toledano.
«Me llegó dentro la afición que tiene Villaseca, su exigencia y el entendimiento del espectáculo que posee»
Sergio Rodríguez dando la vuelta al ruedo. © Eusebio SánchezHoras después, este medio se ha puesto en contacto con el joven, que ha analizado el impacto de su tarde en Villaseca: «La verdad es que, desde que me vi anunciado, los días previos ya los vivía de diferente forma; según me levanté, sabía que la tarde no iba a ser cualquiera, que iba a ser diferente», expone en palabras a esta redacción el propio Rodríguez. «Me llegó dentro la afición que tiene Villaseca, su exigencia y el entendimiento del espectáculo que posee«, añade el joven abulense, natural del municipio de Las Navas del Marqués.
A su primer novillo lo cuajó por la mano derecha: «La verdad que el novillo empezó informal, embistiendo mucho a media altura. En mis dos animales solucioné todo con entrega», expone. La tardanza en caer de ese animal evitó el segundo premio.
Su segundo novillo tuvo algo más de clase: «Fue un animal que al principio no empezó embistiendo muy claro, pero a base de ir haciéndolo y rompiéndolo para adelante, me regaló dos tandas buenas al final«.
Los detalles toreros que dejó a lo largo de la tarde
Los detalles toreros como el uso respetuoso de la montera o que se pusiese una zapatilla que le quitó el novillo en el inicio de rodillas a éste calaron en el tendido: «Al fin y al cabo, es una parte más de nuestro cuerpo. Siempre hay que estar vestido entero de torero. Lo de la montera, no me gusta dejarla en la arena y eso ya va en la personalidad de cada torero. Son detalles que suelo cuidar mucho», indica el joven.
Sus próximas citas
Sus próximas citas son el día 9 a Villa del Prado, el 10 en Guadalix de la Sierra, el 12 en Arganda del Rey, el 16 en El Barraco, el 17 en Los Molinos, el 18 en San Agustín de Guadalix, el 30 en Arnedo y el 1 de octubre en Guadarrama.
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