España vuelve a ser campeona de Europa. Y lo ha hecho a lo grande, conquistando un Eurobasket en el que nadie apostaba por la renovada selección de Sergio Scariolo, que en teoría llegaba al campeonato con la intención de ir creciendo con un equipo joven en la era post-Gasol, pero que ha demostrado que, lejos de las grandes estrellas de la NBA que lucían otras selecciones, la unión y el juego colectivo están siempre por delante en un deporte de equipo. Eso sí, también con un colosal Juancho Hernángomez, que lideró a España en la final con 27 puntos, siete triples y 30 de valoración para acabar ganando a Francia 88-76.
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