LAS VENTAS: 2ª NOVILLADA "OCHO NACIONES"

Miguel Hidalgo da una vuelta al ruedo de ley en Madrid

MADRID: NOBLE NOVILLADA DE PARTIDO DE RESINA

Excelente presentación, 4º y 5º ovacionados en el arrastre

Ficha de la segunda del 'Ocho Naciones' en Las Ventas

Las Ventas (Madrid). Domingo 6 Septiembre. 2ª ciclo 'Ocho Naciones'. Un cuarto de plaza.

Novillos de Partido de Resina, bien presentados y nobles y manejables y uno (6º bis) de Hato Blanco, exigente.

El Califa de Aragua, silencio tras aviso y silencio tras aviso.

Marco Leal, silencio en ambos.

Miguel Hidalgo, silencio tras aviso y vuelta al ruedo tras petición y aviso.

El novillero Miguel Hidalgo ha dado una meritoria vuelta al ruedo en Las Ventas, con la que ha abrochado una actuación en conjunto que le ha valido el reconocimiento del público madrileño. Junto a Hidalgo, sale también con crédito renovado de Madrid la vacada de Partido de Resina que ha lidiado una novillada noble y muy manejable en conjunto que ha propiciado más triunfo del que la terna ha sido capaz de extaer.

Poco en claro sacó esta tarde el venezolano Califa de Aragua, que no terminó de confiarse en la mayor parte de su labor al que abrió plaza. Sólo al final, en las series al natural, el venezolano consiguió encajarse y encontrarle el punto al novillo, aunque la plaza ya se había decantado por el de Partido de Resina y no pudo levantar faena.

El cuarto fue el mejor del encierro, noble como sus hermanos aunque un punto por encima en cuanto a movilidad y motor. El Califa de Aragua anduvo algo más centrado que en el anterior aunque, a tenor de la nobleza y posiblidades del pabloromero, no fue suficiente terminando por aburrir el torero venezolano.

Marco Leal estuvo correcto con otro ejemplar manejable pero con la raza justa. Los mejores detalles los dejó sobre la mano diestra, aunque sobre la zurda no hubo acople alguno. El quinto fue el más deslucido del manejable conjunto, con menos clase. El francés Leal planteó una faena larguísima de mucha más cantidad que calidad y argumento.

Miguel Hidalgo estuvo asentado y templado con un tercer novillo al que aguantó con firmeza varios parones y con el que arrancó buenas series en redondo y algún natural de gran calado. Sin embargo, falló a espadas, por lo que se quedó en silencio.

En el sexto refrendó las buenas sensaciones del tercero e incluso las aumentó con un sobrero de Hato Blanco que le avisó en una colada brutal al comienzo pero que a base de valor y determinación, encontró el camino el torero imponiéndose y haciéndole pasar en una tanda de mucho mérito a derechas, conduciendo muy despacio la embestida. Tras dejar media estocada, parte del público pidió una oreja no concedida que se tradujo en una vuelta de ley.