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Pepe Bienvenida / La suerte suprema

domingo, 11 de agosto de 2013

El día triste de Donostia / Por Paco Mora

¿Habrá todavía quienes duden de que ETA y BILDU son la misma cosa?

"...Para ellos vale más la vida de un toro bravo de quinientos quilos que la de un guardia civil o un paisano, de los cientos que se han llevado por delante sus amigos etarras para que ellos puedan hacer hoy su santa voluntad en el País Vasco..."

El día triste de Donostia

Por Paco Mora
Primer día de la Semana Grande de San Sebastián. Día sin toros por primera vez en varios siglos, por voluntad unilateral de BILDU. Está visto que puede más la sombra de las pistolas de ETA que la voluntad de la inmensa mayoría de los donostiarras. Una concesión más a los que se han erigido en dictadores de esa gran ciudad antes llamada “Sansestabien”. En la que ahora se está como se puede, siempre que no se les haga la contra a los que abominan de la lidia y muerte del toro, aunque todavía no hayan condenado los asesinatos de la banda terrorista vasca. Para ellos vale más la vida de un toro bravo de quinientos quilos que la de un guardia civil o un paisano, de los cientos que se han llevado por delante sus amigos etarras para que ellos puedan hacer hoy su santa voluntad en el País Vasco.

Hoy es un día triste para Donostia y para toda España. Esa hermosa plaza construida con tanta ilusión por Manuel Martínez Flamarique (Chopera) que en paz descanse, un vasco por los cuatro costados, y sin embargo un hombre cuya familia, antes y después de él, tanto ha colaborado a engrandecer la Fiesta de los Toros, esa bella plaza, repito, permanecerá durante toda la Semana Grande, que este año es un poco más pequeña, cerrada y silenciosa porque unos sectarios de los demonios le han arrancado su razón de ser. Aquello para lo que fue levantada: La celebración de corridas de toros. ¿Habrá todavía quienes duden de que ETA y BILDU son la misma cosa?
*** AplausoS


































Plaza de la Constitución
Se edificó como consecuencia de la reconstrucción de la ciudad tras el incendio de 1.813. Es de destacar que nace como recinto preparado para las corridas de toros ya que las casas aún siendo de propiedad privada tenían la servidumbre de ceder los balcones al Ayuntamiento para su explotación en las corridas de toros, lo que se denominaron “balcones toreros”, de ahí que todos los balcones estuvieran, y todavía siguen estándolo, numerados. En esta plaza se dieron toros durante 30 años y por ella pasaron los más afamados espadas de la época, desde “Zapaterillo de Deva” hasta los famosos “Cúchares” y “Paquiro”. La plaza quedó inmortalizada por una litografía realizada por el dibujante G. Carpenter con motivo de una de las corridas celebradas en honor de la Reina Isabel II, sin duda los festejos más importantes celebrados en este coso

Plaza de San martín- Se inauguró en agosto de 1.851 
y tenía una capacidad de 6.000 espectadores

Es la primera Plaza de Toros permanente que tuvo la ciudad. Era de madera y se emplazaba en unos terrenos situados entre el antiguo Mercado de San Martín, la Avenida y la Calle Urbieta.

Plaza de Atocha

Con esta plaza nació la “Semana Grande” que fue creada por el propio Arana para promocionar sus corridas de toros, logrando asimismo coordinarse con el Gran Casino para la organización de bailes, conciertos y fuegos artificiales con el fin de retener el mayor tiempo posible en la ciudad a los forasteros –principalmente franceses- que acudían a ver los toros. Fue la primera operación de “marketing turístico” que tuvo lugar en la ciudad. Por su arena desfilaron Lagartijo, Frascuelo, Guerrita, Cara-Ancha, El Espartero, El Algabeño y el guipuzcoano Mazzantini que el 2 de agosto de 1.885 estoqueó seis toros en solitario, y todas las grandes figuras del final del s. XIX. En esta plaza se celebró la primera corrida nocturna de la historia y 15 de agosto de 1.901 el Picador Andrés Castaño “Cigarrón” fue herido y muerto por el toro “Naranjito” de Saltillo.

Plaza de El Chofre se inauguró el 8 de agosto de 1.903

El auge de las corridas de toros, de la “Semana Grande” y de la presencia de forasteros puso de manifiesto la necesidad de una nueva plaza de toros. En 1.901 la sociedad “Nueva Plaza de Toros de San Sebastián S.A.” comenzó la construcción de un magnífico recinto que se inauguró el 8 de agosto de 1.903 con toros de Ibarra para Mazantini, Bombita I, Antonio Montes y Lagartijo Chico. La historia de esta plaza es más reciente y por supuesto conocida. Estuvo en activo 71 años, hasta 1.973 en la que una descarada operación de especulación urbanística le dio la puntilla.


Plaza de Illumbe
Se inauguró el 11 de agosto de 1.998 con la cubierta e instalaciones más modernas y vanguardistas. Este año cumple quince años de vida con la prohibición de corridas y ante los negros nubarrones que se ciernen sobre su futuro.

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