De la tauromaquia y la vida / por Miguel Monsálvez

'..La corrida pone en escena la dualidad entre la naturaleza humana y la animal, reflejando las tensiones internas del ser humano: razón vs instinto, cultura vs naturaleza..'

De la tauromaquia y la vida

Miguel Monsálvez

A menudo, los taurinos nos enfrentamos a discursos de odio por parte de cierto sector animalista, o cuanto menos, a voces críticas contra la tauromaquia, defendida por muchos como arte, una seña de identidad o cultura legada por nuestros mayores, atacada por otros como una crueldad y una barbarie impropia de una civilización del siglo XXI en un país como España.

En “De la Tauromaquia y la vida” no pretendo otra cosa que dar otro punto de vista a esta fiesta tan nuestra, centenaria, y que parece que poco a poco va recuperando un protagonismo que muchos han querido arrebatarle.

La relación entre la vida y la tauromaquia puede explorarse desde varias perspectivas filosóficas, cada una ofreciendo una visión única sobre cómo estas dos esferas se interrelacionan:

1. Existencialismo:

La tauromaquia puede verse como una metáfora de la lucha constante por la existencia y la afirmación de uno mismo. En la vida, como en la corrida de toros, cada individuo se encierra con sus propios "toros" – desafíos, adversidades, y la lucha por sobrevivir y encontrar significado. El torero, con su valentía y arte, representa la elección de vivir intensamente, enfrentando la muerte para afirmar la vida.

2. Estética y la belleza en lo efímero:

La tauromaquia se celebra por su estética y vistosidad, donde cada movimiento del torero y cada reacción del toro crean una danza efímera de belleza y peligro. Similar, la vida tiene momentos de gran belleza, a menudo en contextos de riesgo o transitoriedad. La filosofía aquí se centra en cómo la apreciación de la belleza está intrínsecamente ligada a la conciencia de su finitud.

3. Dualidad y naturaleza humana:

La corrida pone en escena la dualidad entre la naturaleza humana y la animal, reflejando las tensiones internas del ser humano: razón vs instinto, cultura vs naturaleza. Esta confrontación es una metáfora de la lucha interna que cada persona vive, buscando equilibrio entre sus impulsos y su comportamiento civilizado.

4. La filosofía del momento y la presencia:

En la tauromaquia, cada instante es crucial; un momento de distracción puede ser fatal. Esto resuena con filosofías como el zen o el mindfulness, que enseñan la importancia de vivir en el presente. La vida, como la corrida, exige nuestra plena atención y compromiso con cada momento.

5. Tragedia y Catarsis:

Aristóteles hablaba de la catarsis en la tragedia griega, donde el espectador experimenta emociones intensas que llevan a la purificación emocional. La tauromaquia, con su dramatismo y final trágico, puede ofrecer una forma de catarsis, permitiendo al espectador enfrentar y procesar sentimientos profundos sobre la vida y la muerte.

6. La Moral y la Ética:

Desde una perspectiva ética, la tauromaquia plantea cuestiones sobre la crueldad hacia los animales versus la tradición cultural y la dignidad del enfrentamiento. En la vida, constantemente estamos ante dilemas morales donde debemos equilibrar nuestras acciones entre lo que es culturalmente aceptado y lo que es moralmente justo.

La relación entre la vida y la tauromaquia, por lo tanto, no es sólo sobre el espectáculo o la confrontación física, sino sobre el simbolismo profundo de la existencia humana, la lucha, la belleza, y la inevitable confrontación con la muerte, aquella a la que todos tememos, pero muy pocos son los elegidos para convertirla en arte enfrentándose a ella de frente.

Burladero.tv /Madrid, 14.12.2024