José Antonio del Moral
"...EL G-5 no toreará en Sevilla. La prensa nacional se hace eco. Pero,¿quien tuvo los bemoles de escribir cuando se cocía la noticia?. ¿quien se atrevió a escribir decenas de artículos sobre lo que estaba pasando en las orillas del Guadalquivir?. El Mio Cid..."
Plácidamente transcurría el invierno del pasado año. Quedaban varios días para las fiestas navideñas cuando una mañana y tras un largo tiempo, recibí una llamada de José Antonio del Moral. Me comunicaba lo siguiente: un grupo de figuras formado por Manzanares, Talavante, Morante y Perera, encabezados por El Juli, no se anunciarán en los carteles de la feria de Sevilla. ¿Y eso?, le respondí muy sorprendido. Su contestación fue taxativa: Se rebelan contra la empresa. Pretenden eliminarla e instalaren la gestión de la plaza de toros a una multimillonaria familia mexicana al frente. La familia Bailleres.
Comenzaba un nuevo reto. Otra batalla periodística para José Antonio. El caso G-5 sevillano iniciaba su andadura. Ese mismo día y en los sucesivos, busqué información en las secciones taurinas nacionales. Ni una sola palabra. Ni un solo articulo. A lo sumo, alguna reseña sin fe ni fuerza periodística. EL G-5,me parecía como aficionado un caso serio. Muy serio. Grave. Caso digno de un trabajo periodístico de investigación por la naturaleza y la dimensión del mismo. La ausencia de cinco grandes pilares del toreo en un ciclo del fuste abrileño. ¿Mucha tela ,no ? Varias preguntas en el aire. ¿Motin, boicot, ¿chantaje, o.…dinero?.
Referente a todas estas interrogantes, del Moral, enarbolando una vez mas la bandera de la independencia, comenzó casi a diario a verter toda la información en la web. En uno de sus artículos, publicado el pasado 5 de Enero tocaba una tecla clave del asunto: ”Sevilla tiene un control diferente sobre la empresa de la plaza. No hay una institución política detrás,simplemente un acuerdo privado entre La Real Maestranza y la casa Canorea. Bastará poner encima de la mesa una mejor oferta. Acceder a ello podría resultar mas fácil que participar en un concurso abierto……”
A partir de este articulo comenzaron los fuegos artificiales. El Cid Campeador de la critica taurina , comenzaba su particular Cantar en el desierto del destierro propio del poemario del Mío Cid. Éste, orillado y proscrito por el rey Alfonso VI. Del Moral, por el entorno de la cabeza visible de la inminente rebelión. Pasado algunos días, pidieron su “cabeza en bandeja de plata” tras una apabullante intervención en el programa Clarín de RNE.
Síntoma muy esclarecedor a la par que sospechoso. Parece que la idea del motin cogía fuerza y realismo. Los días pasaban. La crítica nacional, silente. El Cid de la crtítica seguía a su ritmo. Articulos casi a diarios y con visos cada vez mas evidentes del posible boicot. Al final, la noticia se confirma.
EL G-5 no toreará en Sevilla. La prensa nacional se hace eco. Pero,¿quien tuvo los bemoles de escribir cuando se cocía la noticia?. ¿quien se atrevió a escribir decenas de artículos sobre lo que estaba pasando en las orillas del Guadalquivir?. El Mio Cid.
Pasaron Sevilla y su feria. Carteleria discreta, sin los pilares salvo Ponce, fuera del plan en todo momento y con resultados económicos pobres y resentidos por los daños causados. Y la cociencia y consciencia del primer damnificado por su reconocimiento y cariño hacia su figura: Manzanares. Sus recientes palabras y testimonio con su mensaje de tristeza han sido el ejemplo de su grave error. Tarde,aunque se agradece. El resto, ni mu. Transcurrieron los días y la sensación de triunfo del Mio Cid, cada vez mayor. Gran parte de la afición y de los profesionales secundaban la argumentación de El Cid de la critica. Su victoria era casi inminente.
Como le manifesté a nivel personal, todo era una cuestión de tiempo. Al igual que en el caso de José Tomás. He aquí que, el sobrino de El Cid Campeador, Álvaro Rodríguez del Moral, publicó un articulo donde reflejaba la intención de limar las asperezas y tender una mano por parte de El Juli para solucionar el affaire, cara a la próxima campaña.
Primer paso. Primera viga para reconstruir el edificio derrumbado en mil pedazos. Voluntad y deseos que todos deseamos que cristalicen. Voluntad y deseos de reconstruir un error tremebundo. La misma voluntad y deseo que posee en su fuero interno el propio José Antonio del Moral. El Cid de la critica taurina actual que mimetizando al de la figura legendaria, ha logrado convencer y sumar más partidarios. Don Rodrigo Díaz de Vivar en la batalla triunfal de la toma de Alcocer, expulsando a las tropas de Ben Yusuf. Del Moral, con el triunfo del caso G-5. Una batalla más. Y quedan…
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