Imagen siempre lamentable, pero peor es seguir toreando sin límite al inválido. /Fotografía: La Loma/
"...Hoy mismo, hemos visto los pitones más cicateros de la feria, caras abecerradas, y muchos kilos para intentar rematar lo que no tenía remate. Vamos, que además de malos son torpes, o precisamente son torpes por ser tan malos..."
MANSOS, FLOJOS Y… LAS FIGURAS
- Castella, Manzanares y Talavante. No sabemos quién es más y quién es menos culpable de la elección de la ruina de toros que han pisado hoy el ruedo de Las Ventas, pero en la medida que sea, lo son los tres.
Antolín Castro
S.I.14.- Ya llevamos veintiuna tardes consecutivas, solo nos faltan diez, y se sigue soportando, tarde sí y tarde también, un desfile de animales mansos, flojos, descastados… y pueden poner todos los puntos suspensivos que quieran.
Es duro, muy duro, tener que soportar cual penitente esta cruz que nos ha caído encima. Los aficionados lo hacen convencidos que un día llegará en que alguien les redima de tal cruz, pero pasan los días, con sus noches, y nada, la cruz cada vez más pesada.
Malo es lo que sucedió el primer día, o el quinto, o el décimo, o el vigésimo, pero mucho peor es cuando además de los animales mansos, descastados y flojos se hacen acompañar de las figuras. Son como la sal que le falta al plato, el condimento necesario para que la desesperación sea completa.
Hoy estaban las figuras y, claro, ellos aquí cargan también con la culpa de la elección del ganado. Disponen de veedores -los del fútbol suelen ser más avispados- y participan en la verbena de este sí y aquél no. Vamos, que la lían parda entre los de la empresa y los de las figuras, mientras el ganadero deja que todos decidan por él. Conclusión: la presentación, además de una escalera para poder satisfacer gustos ajenos, queda marcada por escoger las caras más bonitas y cómodas que ven en el campo, no vaya a ser que se asusten sus pupilos.
Hoy mismo, hemos visto los pitones más cicateros de la feria, caras abecerradas, y muchos kilos para intentar rematar lo que no tenía remate. Vamos, que además de malos son torpes, o precisamente son torpes por ser tan malos.Cuentan con una ventaja importantísima y es que a la figura de turno se la trae al pairo un posible fracaso o ridículo, seguirá con su tour de 2014 pase lo que pase. Y al aficionado que pretenda exigir algo, que le zurzan.
Hasta ahora no les he nombrado a las figuras que han hecho el paseíllo, pero es de ley hacerlo, deben conocerles: Castella, Manzanares y Talavante. No sabemos quién es más y quién es menos culpable de la elección de la ruina de toros que han pisado hoy el ruedo de Las Ventas, pero en la medida que sea, lo son los tres.
Pero, como decíamos, hay algo peor cuando ellos están con estos ‘enemigos’ y es que les consideran amigos. Da igual que sean flojos, inválidos o tullidos, pues les administrarán larga faena llena de prosopopeya por parte de ellos y genuflexiones por parte de los astados. ¿Qué pasa con tanto pase fuera de cacho, a destiempo y ventajista ante el inválido? pues que aburren a las ovejas, enfadan a los aficionados y éstos les piden que no vuelvan más. Además de lo citado, son sordos, están en la inopia o en lo suyo y la faena ha de durar el tiempo al que ellos acostumbran. Como en otras plazas les vale, pues eso.
Tras cinco toros y cinco faenas en la misma dirección no queda otra que estar adormecido y a todo esto sale el sexto, ya se habían ido los más aburridos y unos cuantos incondicionales del alicantino, con un poco de mejor condición y no huye, a lo que Talavante responde con verónicas y delantales que despiertan al personal. ‘Aquí hay tema’ fue la frase que corrió por los tendidos y no se marcharon más.
Brindó el extremeño al personal, que ya se estaba estirando tras la larga siesta, y nos obsequió con un trasteo desigual, a ambas manos, entre pérdida de manos del toro pero que su fondo de casta le hacían levantarse enseguidita. Buenas tandas, sobre todo por el derecho, y algunos adornos. La espada no estaba aliada con él y dio un mitin que, seguramente, le impidió tocar pelo. Por cierto, el mitin con la espada lo dieron todos, hasta el as de espadas que es Manzanares.
La gente había despertado y se encontró con Talavante y un toreo con mucho ajuste, no porque fuera excesivo, sino que comparado con el toro anterior, parecía un suicida. Buen despertar que agradecieron los espectadores antes de enfilar las escaleras de salida. Ir adormilados en ese trance es muy peligroso.
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