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Pepe Bienvenida / La suerte suprema

sábado, 4 de marzo de 2023

Las Ventas. Son cómplices / por Pla Ventura


"...Son muchos los asuntos que salpican a Miguel Abellán por el cargo que ocupa que, como se demuestra, no está haciendo las cosas bien y eso le pasará factura..."

Son cómplices
Pla Ventura
Cuando todos creíamos que Miguel Abellán, como responsable de los asuntos taurinos de la Comunidad de Madrid velaría por los aficionados, nuestra decepción es mayúscula puesto que, como los hechos demuestran, Abellán es cómplice de la empresa de Madrid y como dato revelador, el mismo no es otro que la mercantil referida, como es sabido por todos, ha subido los precios de las entras sueldas en un porcentaje estratosférico mientas que, Miguel Abellán ha dado la callada por respuesta y, no contento con ello permite que dicha empresa obligue a todo aficionado que quiera ver a Uceda Leal y Fernando Robleño en el día de la Comunidad, 2 de mayo, por cojones tenga que adquirir la entrada para ver a El Juli, Roca Rey y Aguado en la corrida de la Quinta para el 11 de mayo.

Eso es un desacato en toda regla, mejor dicho, algo que raya en la estafa pura y dura. Está claro que, para matar dos pájaros de un tiro son infalibles los personajes citados. Hasta el momento, en la corrida aludida, había precios asequibles a todos los bolsillos, hasta el punto de que, por cinco euros se podía adquirir una localidad mientras que, en esta ocasión, ese mismo palmo de cemento que alguien quiera ocupar vale treinta y dos euros. Yo sigo sin entender nada y, lo que es peor, existe mucha gente enojada con estas gentes que, políticamente, hasta lo pueden pagar muy caro. Por el amor de Dios que, la labor de Miguel Abellán, como he dicho miles de veces y sentencia todo el mundo, no debería ser otra que vigilar a la empresa y beneficiar a los aficionados pero, ocurre justamente todo lo contrario, son cómplices y ellos sabrán sus razones.

Y digo yo, ¿para qué diablos querrán obligar a los aficionados que vayan por libre a que compren la corrida de La Quinta con los tipos antes mencionados? ¿Acaso no estarán seguros de sí mismos o querrán dejar en la miseria a Uceda Leal y a Fernando Robleño? Como fuere, y me duele mucho por Fernando Robleño, la corrida del dos de mayo en Madrid, la que debería de tener rango de acontecimiento, será todo un fracaso si de aficionados hablamos. Han querido liar de tal modo la madeja que, veremos quién es el valiente que la desenreda.

Son muchos los asuntos que salpican a Miguel Abellán por el cargo que ocupa que, como se demuestra, no está haciendo las cosas bien y eso le pasará factura. Ese hombre debería de pensar que, una vez que abandone el opíparo cargo que le dieron sin opositar –además de con un sueldo que jamás soñó- en lado alguno, con toda seguridad, si del mundo del toro hablamos, el pobre no podrá salir a la calle; ahora le respetan –dentro de un orden- por el cargo que ocupa pero, una vez lo deje tendrá un gravísimo problema puesto que, nadie le recordará como un valiente matador de toros que fue, pero sí todos le recordarán como haber sido el cómplice de una empresa particular cuando, como es notorio, este hombre debería de haber velado por los aficionados de Madrid que, como es público, los ha dejado tirados a todos en la cuneta.

Son muchos los puntos de mira los que acechan a Miguel Abellán, el caso contado es uno de ellos pero, amigo, eso de los precios para las entradas sueltas para la feria de Madrid, eso además de pecado mortal, es un presunto atraco en toda regla. Aquí está el cuadro de precios, si lo analizamos nos entra un síncope cardíaco. Mejor que miremos para Cuenca porque la realidad nos obnibula de una manera dramática. Eso sí, como dice un refrán popular, amigos, hasta en el infierno, por dicha razón Simón Casas y sus secuaces sabían dónde tenían que apostar y, ganaron, no podía ser de otro modo. Fijémonos que, la empresa, estableciendo una dictadura bolivariana ha pretendido que, las más de veinte mil localidades de Las Ventas, que todos fueran abonados, cosa imposible por otro lado y por muchas razones obvias. A los que no han querido o podido abonarse, ahí tienen el castigo, precios desorbitados para que se jodan, por memos.

Qué bien se trabaja cuando no se tiene oposición de ningún tipo, es el caso de la empresa de Madrid que, además de montar la feria con el dinero de los abonados, ejercen todo tipo de dictaduras a sabiendas de que nadie les fiscalizará en lo más mínimo. Loas de alabanza para Miguel Abellán por ser tan condescendiente con la empresa que, ambos, sus razones tendrán para llevarse como hermanos.

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