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Pepe Bienvenida / La suerte suprema

martes, 28 de octubre de 2025

Ateismo-Antiteismo II / por Rafael Comino Delgado

'..En definitiva, que el Ateísmo no existe en la realidad. Conozco a más de dos, y a más de cuatro que se declaraban ateos públicamente, y luego a la hora de tener que entrar en un quirófano para someterse a una operación importante rezaron un Padre Nuestro y se santiguaron. Al preguntarles por qué lo hacían si eran ateos, contestaron que, “por si acaso”..'

Ateismo-Antiteismo II

Rafael Comino Delgado
En definitiva, que el Ateísmo no existe en la realidad. Conozco a más de dos, y a más de cuatro que se declaraban ateos públicamente, y luego a la hora de tener que entrar en un quirófano para someterse a una operación importante rezaron un Padre Nuestro y se santiguaron. Al preguntarles por qué lo hacían si eran ateos, contestaron que, “ por si acaso”. Es decir que “a la hora de la verdad, todos o casi todos nos acordamos del Padre”. Cuando somos niños y tenemos un problema nos acordamos de nuestro padre y nuestra madre en la Tierra, y cuando somos adultos nos acordamos de nuestro Padre, el Creador, Dios, y eso queramos o no queramos. A este respecto me viene a la mente el Premio Nobel de Medicina, George Wald, ateo que al final de su vida se convirtió, y que decía, “Cuando se trata del origen de la vida solo hay dos posibilidades: Creación o generación espontánea…La generación espontánea fue rechazada cien años atrás. No queda, por tanto, más que una conclusión: La creación sobrenatural. No puedo aceptarla. ¡No quiero creer en Dios, por eso escojo creer lo que es científicamente imposible: Que la vida surgió espontáneamente”. Podemos, pues admitir que el Ateismo solo existe como concepto, pero nadie es verdaderamente Ateo; o se es Agnóstico, o se es Antiteista, a los que podríamos definirles como, unos ateos muy beligerantes, que combaten a Dios, aunque no creen que exista, y combatir algo que no existe es absurdo, por tanto el Antiteismo sería un concepto absurdo.

Revisando la amplia bibliografía sobre el tema he llegado a la conclusión de que los Ateos, si es que hay alguno, y sobre todo los Antiteistas, son más activos en negar a Dios que los creyentes en afirmar su existencia, pero con gran diferencia; critican al cristianismo, y sobre todo a la religión católica, porque dicen tiene muchos dogmas, cuando como dijera el gran Gilbert Keith Chesterton, “el ateísmo es el dogma más atrevido de los dogmas puesto que es la afirmación de un negativo universal”, ya que nadie ha demostrado ni jamás demostrará que Dios no existe, porque Dios es infinito, y ello es algo que escapa a nuestra mente. Claro que me pueden argumentar que tampoco nadie ha demostrado que existe, de forma rotunda , contundente, y por tanto creer en Él es absurdo, pero es que la Fe es razón y revelación , como afirmaba Francis Collins, director del Proyecto Genoma Humano, y si se tiene Fe se puede creer, basándose en las experiencias vividas, en lo que conocemos del Antiguo y Nuevo Testamento y en la Ciencia, ya que cada vez hay más datos científicos en favor de que existe un Dios Creador, como por ejemplo el Big Bang, y que recoge José Carlos Gonzalez Hurtado en su libro, “Nuevas evidencias de la Existencia de Dios”. Y sobre todo me da la impresión de que los autodenominados Ateos y Antiteistas, más que intentar demostrar que Dios no existe con argumentos científicos, lo que hacen es prohibirle, reacción lógica de una mente muy soberbia, ante su incapacidad para encontrar esos argumentos, porque no existen, y en lugar de así admitirlo se salen de tono, y llegan incluso a insultar a los creyentes, pues como afirmaba Luis Gabriel Carrillo Navas, abogado colombiano, “Cuando se acaban los argumentos los mediocres se refugian en la violencia y el insulto", y no quiero decir con esto que los Ateos y Antiteistas sean mediocres, pero es una realidad que se autoconsideran intelectualmente muy superiores a los creyentes, contra los cuales tienen dichos y hechos de desprecio, e incluso les suelen insultar frecuentemente.

Efectivamente, hemos comprobado que, sobre todo, los Antiteistas, muy frecuentemente ridiculizan e insultan a los creyentes, pero no presentan ni un solo argumento lógico, sensato, científicamente probado, en favor de la no existencia de Dios. Es más, desde los años sesenta del siglo pasado los científicos creyentes vienen siendo atacados por sus colegas ateos” (Guido Pagliarino, 2017).

El Profesor don Manuel Tello, catedrático de “Física de la materia condensada”, de la Universidad de Vascongadas, decía, en 2019:

“En España, para ser progre, el no va más, es decir que uno es ateo y que hay que posicionarse contra la religión y, en particular, contra la católica. Como ocurre con otros temas, al que piensa de otro modo se le califica de 'carca' o 'ultratumba, pero la realidad es que las primeras diez mejores universidades del mundo tienen un departamento de Religión. Son departamentos con un gran volumen de actividades en las que participan personas de alto nivel intelectual”.

En artículo publicado por el Blog Tendencias 21, en 2013, titulado “La ciencia provocó la conversión del ateo más famoso del mundo”, se dice que,

“las obras que hacen una apuesta contundente a favor del ateísmo son rápidamente traducidas y publicadas por las grandes editoriales españolas, sin embargo, salvo raras excepciones, las obras de los autores que muestran una perspectiva más afín al teísmo suelen tener bastante más dificultad para encontrar su hueco en el mundo editorial”. Y el profesor titular de Filosofía de Universidad de Sevilla , F. Soler Gil, decía en 2012,“En las librerías lo suficientemente grandes, el tema de la existencia de Dios solo se presenta desde el punto de vista ateo… De este modo, se genera la falsa impresión de que el debate reflexivo sobre Dios ya está cerrado, y de que lo único que subsiste es una oscura inercia irracional frente a la claridad racional del ateísmo. Todo lo cual es explicable porque como dice don Alejandro Sequeiros, jesuita, Paleontólogo en 2011,“La crítica a las religiones se ha convertido en un gran negocio que mueve millones”.

Sin embargo analizando en profundidad el tema se demuestra que no es así sino todo lo contrario, o más exactamente que los grandes científicos suelen ser creyentes mientras que los de nivel medio y bajo si suelen decir que son ateos o agnósticos.

En el año 2003 el israelita, genetista, Baruch Alba Shalev publicó un libro titulado “Cien años de Premios Nobel”, en el que analiza la religiosidad de todos los Premios Nobel (Medicina, Química, Física, Economía, Literatura y Paz) desde el año 1901, primer año en que se concedieron al año 2000. En total se concedieron a 719 personas, y logó conocer la religiosidad del 90,4 % de ellas; Creyentes eran el 89,7%, y el 10,3 % ateos, agnósticos o librepensadores, pero contabilizando solo los de Medicina, Química y Física el 93,0% eran creyentes.

Nosotros hemos hecho un estudio de la religiosidad de los Premios Nobel de Medicina, Química y Física, dese 1901 a 2025, y hemos comprobado como a medida que nos vamos acercando a nuestros días los científicos tienden a mantener oculta su religión por temor a ser criticados, atacados y discriminados negativamente si se declaran creyentes. En el periodo 1901 a 2018 logramos conocer la religiosidad del 34,5 % de los Premios Nobel , mientras que en el periodo 2019 a 2025 solo la del 18,18 %, pero de los que la conocimos, tanto en el primer periodo como en el último, el porcentaje de creyentes superó el 90 %, y en total fue del 93,8 %, un porcentaje prácticamente igual al hallado por Baruch A. Shalev si contabiliza solo los de Medicina, Química y Física.

Según datos del Pew Forum on Religion and Public Life, publicados por D. Masci, en 2010, “La religiosidad de los científicos norteamericanos no ha cambiado en los últimos 100 años”, y creemos que la de los grandes científicos, de verdad, tampoco en el mundo, pero la de los científicos de menor nivel puede que si.

Ante estos resultados creo oportuno recordar las palabras del gran científico y filosofo inglés, Francis Bacon, “Un poco de Filosofía inclina la mente humana hacia el ateísmo, sin embargo profundizar en la Filosofía conduce la mente humana hacia la religión", las del también gran científico francés, descubridor de la vacuna, Louis Pasteur, "Un poco de ciencia aleja de Dios, pero mucha ciencia devuelve a Él”, y las de el Premio Nobel de Física de 1923, Robert Milikam, “Para mí es impensable que un verdadero ateo pueda ser científico”. Yo añadiría, si se me permite, a esta última afirmación, “…verdadero científico”.

Sinceramente me da la impresión de que los Antiteistas son personas muy poco felices, lo cual es lógico pues, “Las personas felices no pierden el tiempo haciendo el mal, criticando e insultando a los demás. Eso es cosa para gente infeliz, frustrada,…. y envidiosa”. No se quien lo dijo, pero acertó de pleno. Y hasta cierto punto es algo muy lógico, pues creo sinceramente que no se puede ser feliz sin un Dios. Notarás que algo te falta en lo más íntimo de tu alma, pues aunque los Antiteistas no quieran todos tenemos alma.

Con lo que hemos expuesto se confirma, creemos nosotros, que desde que el homo sapiens está sobre la Tierra se ha planteado la existencia de un ser Superior, Creador de todo, es decir, de Dios, por tanto, la religiosidad está dentro del intelecto humano, sin duda alguna, como ya intuían, varios siglos antes de Cristo, Platón y Aristóteles. Mas tarde, el sabio Cicerón diría, “La naturaleza misma ha impreso, en la mente de todos, la idea de un Dios”. Y ya en siglo XVII el filósofo ingles Thomas Hobbes diría que, “La Religión nunca podrá ser abolida de la naturaleza humana. Cualquier intento de abolir la Religión conduce a que nazcan otras nuevas a partir de las antiguas. Ya en nuestros días, la catedrática española de Bioquímica y Biología molecular, doña Natalia López Moratalla dice, “El sentido religioso es innato en el ser humano” (2007), opinión muy similar a la del psicólogo canadiense-norteamericano Paul Bloom (2007): “La religión es un fenómeno natural, una actividad humana innata que surge a través de las formas humanas de pensar, y no a pesar de ellas”.

Finalmente, Alister McGrath, biofísico y teólogo irlandés, profesor en la universidad de Oxford, dice en su libro, “La Ciencia desde la Fe” (2016) que, “Los seres humanos no pueden dejar de pensar en (hablar de) Dios, la Ciencia y la Fe”. Nosotros decimos que los seres humanos pensamos y hablamos de Dios, unos para alabarle y otros para negarle, pero no podemos ignorarle aunque queramos.
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