Feria de Otoño.- Como de pequeño... / por Óscar Castro

'..A la hora del paseíllo. Como les cuento en mi recuerdo a Luis Pla Ventura, a mi llegada a Las Ventas, me llegó la noticia y regresé para escribirle a él. Sorprendido estoy de que mi nieto, al que dejé solo, me haya brindado esta su primera crónica sin ser ni siquiera un aficionado de verdad. Eso sí, va con gusto a la plaza y hoy no le he podido acompañar como cuando era un niño. Gracias Óscar por tu atrevimiento..'

Antolín Castro

Como de pequeño...

Por Óscar Castro - España

Opinión y Toros / 10 Octubre 2025

La tarde empezó diferente a cómo la esperaba. Ojalá hubieses estado sentado a mi lado, abuelo, me hacía gran ilusión revivir este momento contigo como cuando era pequeño.

A la orilla de la plaza la vida cambiaba nuestras intenciones por completo. A veces no es justa con los más valientes, y mucho peor, con las grandes personas, pero así es la vida, imprevisible.

Sentado en la grada del 8, saltaba al ruedo el primer toro, Embriagado, a turno de aquel torero que me contaste tenías ganas de ver, Bruno Aloi.

Un primer toro que dejó mucho que desear, continuos tropezones y desgana de cara al capote, como si aquello no fuese con él. Bruno no se anduvo con rodeos, dos muletazos y una estocada perfecta. Vaya Toro!!

El segundo toro, Mimoso, no era tan mimoso como parecía, embestía ante cualquier capote con ganas de comerse la plaza. Un poco lanzado de más, diría yo, no obstante, “El Mene” tuvo tiempo suficiente para lucirse con la muleta, aún con pequeños sustos dado el cabeceo del toro. A pesar de otro espadazo perfecto, y tras 4 descabellos poco acertados, la faena no era suficiente para el público de Las Ventas.

Un tercero que mostró poca bravura ante el caballo, evadido incluso, trazadas imprevisibles que le costaron el susto a uno de los banderilleros. De azul y luces Pedro Luis tuvo que recurrir a lances largos salvaguardando las distancias, los cabeceos y pequeños saltos le obligaron a alargar la muleta. Otro espadazo que aparentaba ser perfecto, quizás un poco trasero, pero el toro luchó por su vida hasta el final del segundo aviso.

El cuarto toro, de nombre “Pasajero” hizo poco más que eso, pasó por las Ventas y se fue. Mala suerte la del mexicano, a quién el toro levantó por los aires antes de matarlo, otra vez será Bruno.

Llegaba el turno del quinto, el mas pesado de la tarde con 512kg. Asomaba los pitones en el ruedo con deseo, tanto que en su primera embestida no dudó en derribar al picador, ello compensado con tres pares de banderillas arropado entre aplausos. El Mene aprovechó la oportunidad y lo afrontó con deseo, pases estatuarios y series seguidas que ilusionaron a la plaza. Sin embargo, muy a su pesar, el torero falló a la hora de matar. Lo que no quitó que se llevase la ovación de la plaza al terminar la faena.

El sexto de la tarde salió decidido, una vez más, consiguió derribar al caballo, esta vez estampando al picado contra la barrera del 7. No solo nos hizo sobresaltar al inicio, también al final mientras Pedro Luis empuñaba la muleta. Aunque mejor que su anterior toro, tampoco suficiente.

Lo dicho, otro día será!!.