"...Corrida de tres y tres de Jandilla, con tres cuatreños, mal presentados y de nulo juego; y tres toros cinqueños, muy serios y de muy buen juego. Los cuatreños ocuparon la primera parte del festejo y los cinqueños la segunda. Todos los toreros tuvieron material para triunfar...!
FANDIÑO, MAESTRÍA Y PUREZA
Domingo Delgado de la Cámara / Fotos de Andrew Moore
Se llenó la plaza hasta la bandera para ver a Iván Fandiño tras su triunfo del martes pasado. Hizo una faena impecable, que dejó satisfecho al respetable, la verdad es que Fandiño hizo lo único destacable de la corrida de ayer. Fue el único protagonista, la corrida comenzó y terminó con él. Hubo un enorme contraste entre el toreo verdad de Iván Fandiño y el toreo especulativo de sus alternantes, entre el toreo lleno de contenido de Fandiño, y el toreo insustancial de sus compañeros de cartel. Pero vayamos por partes.
Corrida de tres y tres de Jandilla, con tres cuatreños, mal presentados y de nulo juego; y tres toros cinqueños, muy serios y de muy buen juego. Los cuatreños ocuparon la primera parte del festejo y los cinqueños la segunda. Todos los toreros tuvieron material para triunfar.
David Fandila "El Fandi"
¿Qué decir a estas alturas de El Fandi?, pues que ya no brilla ni en su especialidad, las banderillas, con las que se toma todos los alivios habidos y por haber. Su primero era un toro complicado y con sentido, pero Fandila no estuvo dispuesto a apostar nada. El cuarto fue un toro terciado, pero serio y muy bien hecho. Cumplió en todos los tercios, era noble y se dejaba torear, fue un toro fácil. Fandila hizo una faena de muletazos rápidos y lineales. Nada. Lo único bueno de la actuación de El Fandi fue la estocada de este cuarto toro, que murió bellamente, como mueren los toros de casta.
Joselito Adame entró en el cartel sustituyendo a Miguel Abellán. Mejor hubiera sido que hubieran puesto a Juan del Álamo, autor del mejor trasteo de la feria hasta el momento. Desde luego la actuación del mejicano no ha sido como para tirar cohetes. Comenzó la faena a su primero con dos guiñás, citó de lejos en los medios, el viento flameó la muleta y el retrocedió para evitar la cogida. ¿A quién se le ocurre comenzar la faena así, con el viento que hacía en los medios? Y si tomas tan alocada decisión, habrá que aguantar el tirón…pues no. Ya en las tablas del cuatro, donde menos viento hacía, faena desconfiada con un toro violento y nada claro. Por el derecho es brusco y derrota, por el izquierdo no pasa. Al final del trasteo, Adame dio una serie aceptable con la diestra y mató de buena estocada. Petición minoritaria con el voto en contra de los conspicuos, saludó desde el tercio.
Joselito Adame con el 6º
Pero lo peor llegó en el sexto, un cinqueño de imponente trapío pero que embestía con un son y una clase excepcional. Cuando los toros grandes embisten bien, embisten mejor que ninguno, como tienen que mover ese corpachón, embisten con una enorme templanza, la ideal para el buen toreo. El toro soñado para consagrarse en Madrid. Pero muy poca gente se percató de la enorme calidad del toro, porque Adame se cuidó muy mucho de no poner la muleta plana ni una sola vez. Le impresionó mucho el trapío del toro, y su labor fue desconfiada, quitando la muleta de la cara del toro, no dejándole repetir. Ya está claro que Adame va a ser el torero populista de México en los próximos años, pero hasta ahí…sinceramente no le vemos como figura en España.
El segundo de la tarde era una cabra. Y además estaba inválido. De esta última circunstancia se percató hasta una rubia de Wisconsin de viaje turístico por España y que era la primera vez que veía una corrida. El único que no se enteró fue Don Julio Martínez, presidente del festejo. Mantuvo a la cabra inválida contra viento y marea, de paso, negó a Fandiño la posibilidad de lucirse y triunfar.
Iván Fandiño con el 5º
El quinto fue un colorao que se rebrincó en el peto y no hizo nada bueno en los dos primeros tercios. Si rompió a bueno en el último tercio, se debió a Iván Fandiño. Con este toro estuvo sencillamente perfecto. Hemos cantado muchas veces la casta y el pundonor de Fandiño, pero ahora vamos a cantar su maestría. Maestría sustentada en su enorme valor, naturalmente. Valor que le permite esperar hasta el último segundo y tirar de la embestida con suavidad. En los capotes el toro era violentillo y no humillaba. Fandiño presentando los engaños con precisión y templando la embestida, hizo que el toro rompiese y pareciese buenísimo, mejor de lo que era en realidad. Y otra cosa, lo cerca que se los pasa, con mucha pureza. Fue una faena precisa, perfecta, medida. El final con mondeñinas estrujantes, fue de gran emoción. Desgraciadamente, un pinchazo antes de agarrar una gran estocada, y lo que tardó el toro en tumbarse, dejaron el premio en una gran ovación. Pero fue importante, Fandiño demostró una capacidad técnica que hasta ahora no se le había visto. Y es que cuando hay valor del bueno, hay constancia y afición, se termina adquiriendo un poderío enorme. A partir de ahora, Fandiño va a ser un domador de toros, muy pocos se le van a resistir. Al tiempo…
Como siempre, Miguel Martín banderilleó estupendamente. Por último consignar que se guardó un minuto de silencio por el XCIV aniversario de la muerte de Joselito el Gallo, rey de los toreros, promotor de la plaza de Las Ventas y que sigue vivo en el corazón de la afición.
Iván Fandiño
Joselito Adame
Joselito Adame
Joselito Adame
David Fandila "El Fandi"
David Fandila "El Fandi"
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