Sin duda, representa este maratón una gran prueba de fuego, tras el paréntesis de los últimos dos años en los que ninguna de estas ferias pudo celebrarse. Visto de ese modo, debemos celebrarlo como merece, ya que se supone que se trata del gran empujón que necesita la fiesta para salir de esa larga modorra padecida.
Es evidente, sentados en los tendidos de ambas plazas no serán muchos quienes los presencien al completo, quizá un puñado de informadores puedan coincidir en ambas ferias, poco más. Sin embargo, a través de las pantallas de los televisores ya serán muchos más quienes los padezcan o disfruten.
Los telespectadores, mucho mejor que los asistentes en directo, podrán gozar de las comodidades que supone el sillón, el cafetito o la cervecita, con las mejores posibilidades para acercarse al baño o asomarse a la ventana a tomar el aire. Aún así, deberán cuidar de evitar las escaras que pudieran asomarles en las posaderas como consecuencia del continuado uso de los sillones. De ahí que sea muy bueno lo de moverse al baño y/o la ventana con alguna frecuencia.
A través de esos 41 festejos a celebrarse, los aficionados tendrán ocasión de ver a prácticamente todo el escalafón de matadores, no tanto así con rejoneadores o novilleros. En ambos casos solo serán tres las corridas de rejones y tres las novilladas, estas últimas solo en Madrid.
Entre los rejoneadores está claro que la ausencia se llama Diego Ventura, con quien no se han podido arreglar las negociaciones en ninguna de las dos plazas. Una pena dicha ausencia, ya que Diego ocupa, por derecho propio, la cabeza de ese escalafón.
Referente a los matadores, hay diestros a los que se podrá ver muchas tardes, incluso alguno, Morante de la Puebla, hasta media docena de veces. Cinco paseíllos hará El Juli y con cuatro ya son legión, aunque uno, Talavante, los hará solo en Madrid. Pero lo más doloroso, será la ausencia de Emilio de Justo, quien también estaba previsto verle cinco tardes.
Dos tardes, una en cada ruedo, serán protagonizadas por un solo espada en sus únicas comparecencias en esas plazas. Manuel Escribano que cerrará la feria de Sevilla despachando la corrida de Miura y Paco Ureña en Madrid matando seis toros de distintas ganaderías. También habrá un mano a mano con la de Victorino en la capital hispalense, Ferrera y Perera la matarán en ausencia del lesionado De Justo. Otro mano a mano se llevará a cabo en Madrid con la reaparición de Talavante, quien lo hará junto a Juan Ortega.
De ganaderías ya no es tan completo el panorama, las figuras condicionan muy mucho este elenco, faltarán varios encastes a las dos citas. Abunda, en demasía, la procedencia Domecq, llegando incluso a sumar tres tardes la de Victoriano del Río. Repiten en las dos ferias: Jandilla, El Parralejo, Garcigrande, Juan Pedro Domecq y Victorino Martín.
Levantando la bandera de otros encastes, una excepción hará Sevilla con la clásica presencia de la corrida de Miura y, por supuesto, el resto todo en Madrid, donde se podrán ver Alcurrucén, La Quinta, Pedraza de Yeltes, Arauz de Robles, Samuel Flores, José Escolar, Adolfo Martín y toda la gama de los Fraile: El Pilar, Valdefresno y Puerto de San Lorenzo.
¡¡Preparados, listos… ya!! La maratón, fundamentalmente en televisión, da comienzo.
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