Ya he visto a Clemente / por José Carlos Arévalo

'..Le vi la semana pasada, en la ganadería de Victoriano del Rio, donde toreó tres vacas utreras y bien armadas. Y saqué estas conclusiones:

Brega con arte y cadencia, con eficacia y economía de lances.

Su toreo de capa es elegante y muy reunido.

Como torero pertenece a la generación del temple..'

EN CORTO Y POR DERECHO

Ya he visto a Clemente

José Carlos Arévalo

Hace años, cuando la prensa española informaba sobre el mundo de los toros, el aficionado de Madrid, ciudad donde yo vivía, conocía al dedillo a todos los toreros, a unos porque los había visto, y también a los que no habían debutado en Madrid, porque la prensa lo reseñaba todo. Pero hoy la fiesta de los toros es la gran ausente de la información En consecuencia, los aficionados desconocen la mayor parte de los nuevos toreros. Antes disfrutaban de ser “toreros novedad”, atributo que acrecentaba su interés taquillero. Hoy sucede todo lo contrario, el torero nuevo no es novedad porque nadie tiene la menor idea de cómo es, de cómo torea. Pero el público no tiene la culpa, nadie se lo cuenta. Entradas corrida toros

El caso de Clemente, que ha roto como figura en Francia, es distinto. Aquí, su nombre sonó de pronto y con fuerza el año pasado, aunque solo entre los aficionados que “bichean” en los portales de Internet. Sucedió a mediados de la última temporada, cuando indultó en 48 horas un toro de Santiago Domecq, en Dax, y otro de Robert Margé, en Béziers, y volvió a suceder un par de meses después al saberse que había sido declarado triunfador de la temporada francesa.

Mas por estos pagos el caso Clemente tampoco es lo que se entendía por “torero novedad”. Quizá merezca otro apelativo, el de “torero sorpresa”. Y la sorpresa viene de lo bien colocado que está en San Isidro: Primera de Feria, toros de Victoriano del Rio para Alejandro Talavante, Juan Ortega y Clemente, que confirma la alternativa. O sea, la primera feria del mundo, una ganadería de alto prestigio y dos figuras del toreo. ¿Por qué se coloca con tanta categoría a un torero desconocido en España, que se doctoró en Zamora hace unos años, salió por la Puerta Grande y no toreó ni una más?

Supongo que por varias razones. La primera: porque desde antiguo, las figuras de otros países se presentaban como figuras en Madrid, aunque que nadie los conociera. La segunda: porque la empresa, el ganadero y sus dos colegas piensan que se merece dicho puesto. La tercera: porque lo apodera un torero de culto, desconocido del público y valorado por los profesionales, Román Pérez, que hacía un toreo muy puro y se retiró, inexplicablemente, antes de tiempo. Y la cuarta ya no la supongo: porque acabo de ver a Clemente en el campo y hace y dice el toreo con naturalidad y un trazo deslumbrante.Bullfighting equipment rentalEntradas corrida toros

Le vi la semana pasada, en la ganadería de Victoriano del Rio, donde toreó tres vacas utreras y bien armadas. Y saqué estas conclusiones:

Brega con arte y cadencia, con eficacia y economía de lances.

Su toreo de capa es elegante y muy reunido.

Como torero pertenece a la generación del temple. Su trazo armónico embebe la embestida sin que los pitones, imantados al engaño, lo punteen: pulso y tacto. Como muletero me gusta más con la izquierda porque su embroque tiene pellizco y su muñeca maneja los vuelos con cadencia y precisión y liga el toreo en redondo con firmeza y naturalidad: cada pase, un paso. Y sorprende y emociona porque tanto con de capa como con la muletea torea con limpieza a pesar de pasarse la embestida muy cerca. Peligroso: no sé si se lo consentirá el toro.

Y, al final, a la sorpresa torera se sumó una sorpresa ganadera : su primera vaca tuvo una clase excepcional; la segunda, bravura encastada; y a la tercera, que era la más brava, le faltaron fuerzas y fondo. Ninguna de las tres utreras fue aprobada. Me desconcertó don Victoriano, pero respeto su exigencia: los resultados de sus toros en la plaza parece que le dan la razón.

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