Está terminando la danza en los ruedos pero se agita la de los apoderamientos. Es lo que pasa siempre en esta época y que se bautiza como el baile de fin de temporada de apoderados y toreros.
Y también DENIS LORÉ, OSCAR FERNÁNDEZ y RAFAEL PEREA “EL BONI” y JOSÉ IGNACIO de la SERNA desligados de MÁXIME SOLERA, FILIBERTO , SANTANA CLAROS y JOSÉ ENRIQUE COLOMBO. Y como siempre –salvo LIDOY- ni una palabra de todos estos cambios en la época del periodismo desaparecido y el estallido de la comunicación. Se sabe todo de todos en otras actividades, sin ir más lejos en el fútbol : cuando fichan cifras, tiempos, contratos, cláusulas, porcentajes de publicidad y cuando se van nos enteramos de todos los detalles. Pero en el silencio sepulcral del taurinismo, nada.
Hay más pero esto se parecería a una guía telefónica.
Sí, en el toreo, la ley del silencio y la amabilidad educadísima porque todos estaban contentos con la gestión, con el dinero que ganaban, con las corridas que toreaban, con el número de festejos contratados, con los carteles, las ganaderías…Todo iba viento en popa pero hay que cambiar de aires… Y se van matadores y rejoneador que han hecho buenas temporadas. Enhorabuena por lo hermanados que quedan ex-mentores y matadores. Ejemplo de cariño para la mejor religión del mundo. Estaban muy contentos y por eso rompen.
El duelo se les ha pasado a MARTÍNEZ ERICE y a ÁNGEL GUZMÁN y la consiguiente tristeza de la ruptura. El primero al fichar al sin picadores CRISTIANO TORRES , interesante novillero visto en varias de sus actuaciones en CANAL SUR y el segundo con DAMIÁN CASTAÑO.
Habrá nuevas rupturas, educadísimas y cariñosísimas nuevas rupturas, porque todavía no se ha parado la danza de los adioses.
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