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Pepe Bienvenida / La suerte suprema

miércoles, 12 de enero de 2022

Kroos: se escribe Toni pero se pronuncia don Antonio / por Juan Manuel Rodríguez

 Toni Kroos, en un partido con el Real Madrid esta temporada en la Champions

Al Real Madrid casi siempre le ha ido bien con los futbolistas alemanes. Le fue bien con Netzer y con Breitner, significadamente le fue bien con Stielike, incluso le fue bien con Schuster y ahora le está yendo magníficamente bien con Kroos. Entró en el Real Madrid y el Real Madrid entró en él. No hizo falta explicarle nada, ya venía aprendido de Múnich. Y ahora quiere retirarse en el Madrid y esto supone un orgullo para cualquier madridista.

Kroos: se escribe Toni pero se pronuncia don Antonio

La llegada de Toni Kroos al Real Madrid en el verano de 2014 y por 25 millones de euros fue, como él, silenciosa. Hace un par de meses su representante de toda la vida, Volker Struth, desveló el por qué Kroos, que salvo una cesión de 6 meses al Bayer Leverkusen había estado siempre en el Bayern de Múnich, fichó por el Madrid. No fue por Sahin, como erróneamente dije ayer en El Primer Palo, sino por Götze. El equipo alemán le ofreció 6 millones por temporada a Kroos para que ampliara su contrato pero éste dijo ‘no’ porque sabía que a Götze le habían ofrecido 10. Hoeness le dijo que él jamás ganaría 10 millones de euros en el Bayern y le exigió que llamara a su agente y Kroos simplemente le respondió que no hacía falta porque su representante y él pensaban lo mismo al respecto. El United era el mejor posicionado para hacerse con Kroos, que ya se negó rotundamente a negociar con el Bayern, pero entonces entró en liza el Real Madrid y a Toni no le quedó ninguna duda. Como el Bayern quería sacar algo por él, lo que fuera, Kroos acabó en el Madrid por 25 millones de euros. Para que nos hagamos una idea de lo barato que le salió Kroos al Real Madrid baste decir que hace 5 meses, por ejemplo, Emerson Royal fue traspasado del Barcelona al Tottenham por 25 millones de euros. Kroos y Emerson. No hay más que decir.

El éxito del Real Madrid de Florentino consiste en pagar caro cuando hay que pagar caro y hacerlo barato cuando la ocasión lo requiere. Hace poco oí al intermediario que llevó a Beckham del United al Madrid contar la historia del fichaje de David por el Real. Florentino estaba dispuesto a pagar 40 millones por él y cuando José Ángel Sánchez llegó a Manchester se encontró con la tremenda sorpresa de que pedían 35; cuando JAS llamó a Florentino y se lo dijo, éste le respondió: "ofrece 25". Y así fue: Beckham fichó por 25 millones en cinco plazos, más un bonus de otros 10 a tenor de los títulos conseguidos. Es la diferencia entre gestionar bien o irse a Harvard a explicar el modelo del Barça como hizo José María Bartomeu. Pero volviendo a Kroos. Decía que Toni firmó silenciosamente por el Madrid y han pasado ya 8 años desde entonces y ahora, de repente, muchos aficionados han caído en la cuenta de que el alemán es una de las piezas clave del equipo blanco en sus éxitos desde entonces. Porque Kroos, como buen alemán, es silencioso, sigiloso, como un gato. Juega en silencio, renueva en silencio y, según me cuentan, ejerce un poderoso liderazgo en silencio. Como habla poco, cuando lo hace todo el mundo se calla y escucha a Toni Kroos. Y como se lo piensa mucho a la hora de opinar, siempre que lo hace no da puntada sin hilo o, como se diría en alemán, stich ohne faden.

Ayer Kroos (que hoy ha llamado Javi a Xavi sin mala intención aunque la sustitución de la x por la j de un tipo que nació en Greifswald haya sentado tan mal en Barcelona) dijo que el Real Madrid y él tienen una relación tan especial que no se la jugaría nunca en una partida de póquer. También dijo que él quiere retirarse en el Madrid y yo, en este caso concreto, me lo creo. Si Kroos dijera mañana que él jugaría gratis en el Real Madrid también me lo creería porque seguro que habría hecho sus cuentas antes de decirlo, pero no lo dirá porque nadie le pide un falso exhibicionismo. Ningún futbolista profesional jugaría gratis en ningún sitio, ni falta que hace: el talento vale dinero también en el fútbol. Inmediatamente pensamos en Sergio Ramos, que sí se jugó sus 15 años en el club en una partida de póquer contra Florentino Pérez. Ramos tenía un as y el presidente del Madrid aceptó el reto. Y Sergio perdió. Porque ahora ya no creo que a nadie le quepa la menor duda de que Ramos ha perdido esa partida, ¿no? Pasar del trece veces campeón de Europa al PSG supone descender al menos tres escalones.

Al Real Madrid casi siempre le ha ido bien con los futbolistas alemanes. Le fue bien con Netzer y con Breitner, significadamente le fue bien con Stielike, incluso le fue bien con Schuster y ahora le está yendo magníficamente bien con Kroos. Entró en el Real Madrid y el Real Madrid entró en él. No hizo falta explicarle nada, ya venía aprendido de Múnich. Y ahora quiere retirarse en el Madrid y esto supone un orgullo para cualquier madridista. Colgará las botas aquí porque él quiere y no porque lo diga su representante, que no es su hermano. No se jugará su relación con el Madrid en una partida de póquer porque no merece la pena. Modric tampoco lo hará y renovará por un año. Toni Kroos sí entendió que, en el Madrid, los jugadores son menos importantes que el escudo al que representan. Su forma felina de conducirse por la vida encaja a la perfección con el Real Madrid y especialmente con el que lleva construyendo desde 2000 Florentino Pérez. Y eso lo saben en Harvard sin tener que ir. Se escribe Toni pero se pronuncia don Antonio.

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