El secretario de Estado para el Deporte, Miguel Cardenal, escribe un sorprendente artículo titulado "Orgullosos del Barça" en el que tacha de "acoso" al FC Barcelona a las informaciones en las que se da cuenta de la investigación judicial por el fichaje de Neymar. El juez Ruz ha imputado al club catalán por un delito contra la Hacienda Pública. El escándalo ya le costó el cargo a Sandro Rosell después de que se confirmase que el fichaje de Neymar rondó, al menos, los 90 millones y no los 57 que se había informado a los socios. La Secretaría de Estado para el Deporte está adscrita a Presidencia del Gobierno, es decir que depende directamente de Mariano Rajoy.
Después de elogiar al FC Barcelona como "un activo fundamental de la Marca España, que apuesta por la cantera como seña de identidad" y que "cree con decisión en la igualdad", entre un sinfín de elogios, Miguel Cardenal dice lo siguiente:
Por eso, me rebelo ante la desmesura a la que asisto estos días. No haría honor a la responsabilidad que me han confiado si callara mientras un escudo que ha aportado a nuestro deporte tanto como el que más es acosado y acusado.
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Miguel Cardenal, junto al ministro de Cultura, José Ignacio Wert, en una imagen de archivo | CSD
Somos muchos los “tontos que no descansamos” y somos tontos porque algunos pretendemos que la “Marca España” quede registrada más allá del deporte.
ResponderEliminarAlgunos listos se empeña en temas que no tienen nada que ver con el deporte activo, hacer lo blanco negro en el “deporte de la manipulación”, pero para una parte muy amplia de ciudadanos solamente le interesa leer y escuchar lo que le agrada leer y oir, aunque no sea la verdad.
Podía firmar mi comentario como siempre, pero en esta ocasión y si el director del blog me lo permite lo haré en anónimo, pero haciendo saber y para que quede definitivamente claro que el TONTO soy yo.
Este muchacho que le han nombrado secretario de Estado para el deporte es hijo del que fuera Fiscal General del Estado en el gobierno de Aznar, Jesú Cardenal, que siendo un buen hombre, fue un reconocido inútil en el cumplimiento de las obligaciones de su cargo, aunque no fuera tonto al saber dejar a su hijo bien colocado en esfera pepera; el cual viene ahora a mostrar un sectarismo insólito como miembro del gobierno de Rajoy defendiendo a un club de fútbol -el autodenominado más que un club- enemigo de España y tratando de presionar a la autoridad judicial en el encausamiento de sus directivos por chorizos. Las cosas que hay que ver con el Mariano al frente de este desaguisado de sinvergüenzas. Sería mucho pensar que a este tío piltrafa enchufado lo van a cesar, cuando vemos que no se hacen el harakiri desde Rajoy para abajo por embusteros y traidores. Vaya tela, vaya tela con esta castuza política.
ResponderEliminarF. Vilches