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Pepe Bienvenida / La suerte suprema

martes, 22 de noviembre de 2011

El desplante de Juan Belmonte ante un toro de Miura


El desplante de Juan Belmonte 
ante un toro de Miura

Contaba Juan Belmonte de una tarde, cuando en el fragor de la faena acabó haciéndole un desplante a un toro de Miura: "Al cruzar como una ráfaga en mi mente esta idea, miré a los ojos del toro y vi en aquellos ojos una luz que nunca olvidaré, el toro había reaccionado y sentí claramente que en cuanto me moviera me cogía. En un esfuerzo supremo, tiré de mí mismo con todo el vigor que me permitían mis fuerzas. Y, efectivamente, apenas había iniciado la retirada, el toro arremetió contra mí y me enganchó la taleguilla"
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Lo contaba Enrique Vila en su libro “Miuras, cien años de gloria y de tragedias”, --editado en Sevilla en diciembre del ya lejano año de 1941—un libro de especial interés para conocer los entresijos de la ganadería de Zahariche. Si se recuerdan los textos, la anécdota está muy en la línea de otras que el maestro Chávez Nogales en su “Juan Belmonte”. Vila relataba así la vivencia del Pasmo de Triana:

“A un toro berrendo, grande, bien armado, le hice una faena de muleta fuerte. Al final el toro quedó derrotado, al parecer, juntas las manos y con el hocico a ras del suelo. Le di por vencido y le hice el adorno que por entonces se utilizaba: me arrodillé en la misma cara, muy cerca de los cuernos. 

Así permanecí un espacio de tiempo que no sabría medir ahora, olvidando con el calor de la faena y las aclamaciones del público que aquel toro era de Miura.

Al cruzar como una ráfaga en mi mente esta idea, miré a los ojos del toro y vi en aquellos ojos una luz que nunca olvidaré, el toro había reaccionado y sentí claramente que en cuanto me moviera me cogía.

En un esfuerzo supremo, tiré de mí mismo con todo el vigor que me permitían mis fuerzas. Y, efectivamente, apenas había iniciado la retirada, el toro arremetió contra mí y me enganchó la taleguilla. Parte de la tela se quedó prendida sobre el pitón, mientras yo rodaba por el suelo. Ya dio tiempo a que Maera metiera el capote y se llevara al toro”.
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Taurología

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