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Pepe Bienvenida / La suerte suprema

sábado, 11 de abril de 2015

Sevilla: «La devoción religiosa y el toreo siempre han ido de la mano» / Pregón de Álvaro Rodríguez del Moral.






Álvaro Rodríguez del Moral pronunció en el Ateneo el pregón de la tertulia taurina de Los 13 con una reivindicación de la Edad de Plata

«La devoción religiosa y el toreo siempre han ido de la mano»

Asombró el pregón de Álvaro Rodríguez del Moral en el Ateneo de Sevilla


ALEJANDRO LUQUE / EL CORREO DE ANDALUCIA
El salón de actos del Ateneo de Sevilla acogió ayer el pregón de la tertulia taurina Los 13 que tradicionalmente anuncia la Feria de Abril, y que ayer fue pronunciado por Álvaro Rodríguez del Moral,crítico de El Correo de Andalucía.

Aunque inicialmente estaba previsto que la presentación del pregonero corriera a cargo de Miguel Ruiz de Vargas, éste se excusó por una dolencia ocular y, tras el saludo inaugural de la presidenta de Los 13, Martina Blatiere, cedió su puesto a Carlos Javier Trejo, quien hizo una glosa de Rodríguez del Moral como «un verdadero maestro a pesar de su juventud», cuyo universo tiene como coordenadas «el periodismo y los toros, junto con el dibujo y el universo cofrade».

Trejo destacó el trabajo de divulgación que Rodríguez del Moral viene realizando desde las páginas de El Correo y de su blog, La tarde colgada a un hombro, como «un regalo de galanura, inteligencia y precisión», e incluso llegó a calificarlo cariñosamente como «diagnosticador y pacificador del avispero sevillano».

La intervención de Rodríguez del Moral se basó en los vínculos entre el mundo del toro y la devoción religiosa, tantas veces entreverada de supersticiones, manías o caprichosos ritos. «La Macarena, el Gran Poder, la Esperanza de Triana, patronas de mil pueblos, santos abogados de tantos trances difíciles, velan la tensa espera del matador de toros», describió el pregonero. «Cerca de allí, un capote de seda bordado con un Nazareno orlado de potencias descansa sobre una silla. Por supuesto, nada sobre la cama y mucho menos, la montera o un sombrero. No, no es momento de jugar con la suerte», agregó, antes de hacer un prolijo recorrido por los rezos de maestros como Dávila Miura, Morante, Francisco y Cayetano Rivera Ordóñez, pero también de mitos como Joselito.

«La religión y el toreo siempre han ido de la mano en este arte que tanto sabe de miedos, soledades y esperanzas», aseveró. «Las calles, los templos y los rincones de Sevilla son un circuito secreto de esas devociones toreras que podrían comenzar con el nombrado San José que regaló el malogrado Pepe Hillo a la capilla del Baratillo a finales del siglo XVIII».

Asimismo, Rodríguez del Moral hizo una reivindicación de la Edad de Plata, el periodo creativo comprendido entre los años 20 y el estallido de la Guerra Civil española, y donde una vez más confluyen toros, rezos y versos. Como brillantes botones de muestra, citó a García Lorca, Manuel Machado, Rafael Alberti o Fernando Villalón, y a la Esperanza de la Macarena como «un icono inconfundible de la ciudad en el primer cuarto del siglo XX».

«Al alcanzar este nuevo punto sólo podemos llegar a una certeza: la Macarena es un elemento más del pujante y desacomplejado panorama artístico de aquella Edad de Plata que se marchitó a la vez que el país se polarizaba en dos bandos irreconciliables: la Virgen de la Esperanza se convierte en inspiración de pintores, diseñadores, arquitectos, músicos, dramaturgos e incluso en musa de las vanguardias», apuntó.

Con su conocido gusto por el detalle y una bien dosificada erudición, Álvaro Rodríguez del Moral concluyó su discurso, muy aplaudido al final, con una última evocación de Joselito y su filiación macarena, que según el pregonero ni siquiera concluiría con la muerte del toreo. «Incluso llegó a circular una leyenda urbana en torno al incendio de San Gil, en julio del 36, que situaba el escondite de la Virgen en el panteón de Joselito», apuntó el periodista.
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Creo que nadie hasta lo que anoche escuchamos de la voz de mi sobrino Álvaro haya abarcado con tanta erudición como galanura literaria la histórica simbiosis que en Sevilla se ha venido produciendo entre el toreo y la Semana Santa. Quizá el mejor especialista que hayamos conocido en desentrañar y entrelazar ambas manifestaciones, Álvaro llegó a deleitar al auditorio como pocas veces hemos visto que ocurra en parecidos actos. Este pregón merece ser publicado y también repetido en un marco, no digo más importante, sino más grande. Si este maravilloso pregón lo hubiera pronunciado Álvaro en el teatro que sirve de marco escénico a los pregones oficiales que se celebran en las mañanas del Domingo de Resurrección, estaríamos hablando de una pieza tan histórica como desbordante y desde luego superior a cuantos hasta este mismo año hemos venido escuchando en el Lope de Vega.

1 comentario:

  1. Por equivocación mía, este comentario tendría que estar en este post, por lo que nuevamente lo envió en el que es su lugar. Gracias

    La devoción religiosa y el “timo” siempre han ido de la mano.

    Esto de la religiosidad es un titulo que como dice la canción “Ni se compra ni se vende” pero el cariño al dinero, es tan verdadero que te cubres con el capote religioso para defraudar a los llamados aficionados que se creen que saben y no saben de la misa taurina ni la mitad. Pero son tan buenos, por no decir tontos, que se la cuelan un festejo si y el otro también.
    Desde el empresario, pasando por el “fabricante” es decir, el ganadero que fabrica el torito que les exigen apoderados de los toreros que manda en el escalafón para que el timazo no decaiga y siga viviendo el gran fraude.

    No hay tampoco que olvidarse de los políticos, sobretodo de los del PP, personas muy religiosas, algunos de misa diaria y los más ocupados de misa dominguera. Y luego pues ya vemos como aplican su particular catecismo, “Señor no te pido que me des, pero ponme donde haya… (y en su interior piensa) que ya me encargare yo de hacerme el “trasvase”.

    Hay tanta hipocresía en los políticos de todos los colores que da autentico asco, pero ese asco se acentúa mucho más en la derecha, porque es esta la de “misa y golpes de pecho”.

    Ahí los explotadores laborales, aquellos oligarcas y empresarios que saliendo de misa siguen en el fraude millonario para estafar a cuanto necesitado se le cruce en el camino.

    Ahí las “señoras” que saliendo de misa seguirán explotando a sus empleadas domésticas.

    José Ángel Ferre

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