Aspiramos a poco / por Pla Ventura

 "..Antes que publicar la foto de cualquier indeseable de los muchos aquí nombrados, hemos creído que la imagen de un ser bueno por naturaleza, LA MADRE TERESA, nos sirva para reconfortar nuestros corazones.."

Aspiramos a poco

Pla Ventura 

Toros de Lidia/9 enero, 2024

En estos primeros días del año todos nos deseamos toda clase de venturas, salud, trabajo, bienestar, paz, orden a ser posible y, por encima de todo, nos deseamos lo más difícil del mundo, el respeto, ese valor que antaño adornaba nuestra sociedad y que, por mor de la clase política se ha perdido para siempre. Aspiramos a poco sabedores de que las ilusiones que todos anhelábamos, ninguna se cumplirá, de ahí el fracaso que vive en nuestras entrañas. ¿Tan difícil resulta vivir en normalidad? Difícil no, lo siguiente. ¡Imposible! Lo que debería ser lo más sencillo del mundo se ha tornado una quimera insalvable que, al pensarlo se nos desvanecen todos los buenos deseos que queremos para nosotros y que soñamos para los demás.

¿Y cómo podemos afrontar un año que se nos antoja incierto, complicado, sin el menor atisbo de justicia ni de ilusión por parte de nuestra clase política? Alguien respondería esta pregunta diciéndome que, lo que en verdad merece la pena es alejarnos del mundo de la política, cosa que parece muy sencilla pero que es totalmente imposible. Si la vida pudiéramos circunscribirla al fútbol, por ejemplo, si el equipo de nuestros amores nos hace sufrir más de la cuenta, nos pasamos al “enemigo” y todo solventado.

Hemos conocido a mucha gente que dice aquello de “yo paso de la política”. Y así debería ser pero, cada cual en su parcela, aunque lo niegue, está sujeta a cualquier tipo de decisión política, ahí está el caso de Cataluña, 

sin ir más lejos en que, seguro estoy que muchísimas personas desearían que sus hijos estudiasen en español de toda la vida, pues nada de eso, se estudia el catalán porque lo han decidido una manada de desaprensivos ignorantes de mierda que, sin pararse en pensar en los demás hacen todo el daño del mundo. 

Ahora, gracias a esa maldita política “social” que dicen aplicar los criminales de izquierda, como quiera que han tenido que ceder ante el chantaje de los que dicen apoyarles, entre otras medidas se ha decidido que, los empleados de cualquier multinacional que tenga sede en Cataluña o País Vasco, o en su defecto, en Almería o Castellón, los empleados de vascos o catalanes cobrarán un 20% más de salario que sus mismos compañeros de otras localidades de España que, sus gobiernos, no han sido chantajeados.

Miles de acciones de este nivel son las que el gobierno actual, el que todos quisiéramos pasar página marchándonos a otro país, a diario siguen propiciando el caldo de cultivo para que España, dentro de muy poco tiempo tengamos una nueva guerra civil que, sin duda, la están fraguando los criminales que nos gobiernan, los que hablan de consenso, igualdad y bienestar social para todos; para todos los que les han votado, es que no han terminado la frase. Por cierto, respecto a la desigualdad de salario entre los que cobrarán más los que han chantajeado al gobierno, entre criminales anda el juego, Pepe Álvarez y Unai Sordo se han hecho los suecos y no han dicho ni media palabra. Yo que tampoco soy gilipollas, si me dieran ciento veinte mil euros cada año sin saber los motivos, para mis adentros pensaría lo mismo que estos individuos, a los trabajadores que les parta un rayo.

Ahora se dan cuenta algunas comunidades del peligro que tienen que los estudiantes de cualquier nivel se lleven el teléfono al “trabajo” y han decidido que el mismo no se utilice durante las clases y, lo dicen como si fuera un logro cuando, esa prohibición debería de haber sido texto de ley desde el primer día que se utilizó el teléfono que, según he podido saber, niños de ocho o diez años ya consumen pornografía al más alto nivel. Por cierto, del teléfono y sus consecuencias hablaremos otro día pero, la pura verdad es la que tenemos encima de la mesa, la gente no puede vivir sin el teléfono, si les hiciésemos una encuesta en la que ponderásemos a los padres o al teléfono, la sorpresa que nos llevaríamos sería de espanto.

Claro que, como andamos de sorpresa en sorpresa, éstas no son patrimonio exclusivo de Pedro Sánchez y sus malditas huestes, eso habrá pensado El Papa que, en su bondad –y eso no lo niega nadie, pero es el Papa, no un monaguillo cualquiera- ha dicho que los homosexuales tienen los mismos derechos para el matrimonio que cualquier pareja “normal” entre un hombre y una mujer. Joder, eso ya es empezar el año con un desgarro en el alma por no nombrar el lugar exacto pero, el Santo Padre debería de reflexionar y, ante todo, sin herir a nadie, no compararnos a la clase normalita, la que reproduce y alimenta el mundo con nuevas criaturas, junto a todos aquellos que aspiran a vivir por encima, si de valores hablamos, de todos los mortales que hemos consagrado nuestra vida para que el mundo no se acabe jamás. Si el Papa bendice eso y ya lo ha dicho, es la señal evidente de que el mundo le importa un pito. ¡Lo que le faltaba a la Iglesia, Santidad!