La saga extremeña de Los Porrina cuaja con dos hermanos extraordinarios: Ramón "El Portugués", y Antonio Suárez Salazar, Guadiana. Tablao Cordobés de la Rambla de Barcelona
Escritor y cronista.
Otra vez de paso por Madrid, y tomando el pulso a las atmósferas flamencas capitalinas... En “Clamores”, templo del jazz y también frecuente escenario de veladas de guitarra y cante, ha renovado hace poco sus credenciales “El Torta” en el ciclo programado por Antonio Benamargo. No descendemos del tren a tiempo de dejarnos caer por allí. Pero, aunque el lluvioso clima no brinda a los paseos, en los Madriles siempre hay sitio donde hallar cobijo. Así que acertamos a pasar por la exposición de pintura de Jean-Jacques Falaye inaugurada en el Instituto Francés, antes de salir corriendo hacia el “Casa Patas” de Martín Guerrero, donde se presenta en sociedad una de las producciones discográficas flamencas mejor acogidas del año: “Sonakai”, el nuevo álbum de “Guadiana” para Lola Records, en el que cuenta como guitarra base con David Cerreduela y el acompañamiento de “Tomatito” en la bulería. Un disco histórico, además, por registrar el último toque por soleá del querido Enrique de Melchor.
Las cazuelas de rabo de toro, los platos de buen jamón y las áureas cervezas de rizada pleamar resbalan por la barra a pocos metros de la puerta del tablao, la Puerta del Arte. La afición se agolpa, expectante, a la entrada de ese acceso mágico. Y es que el sobrino del gran “Porrina de Badajoz” se encuentra en los últimos tiempos en las quinielas de los melómanos de lo hondo por los patentes logros que le son de anotar en su apuesta cantaora, combinación de dulzura y grito airado y siempre con la afinación en su punto de mira. Bravo a la par que sofisticado, “Guadiana” —que, por la calidad de su metal, pide merecido paso a los carteles de los festivales- indagó con sabor en palos como la malagueña, la caña y la zambra caracolera y consiguió espléndidos momentos por soleá, inspirado por el toque de enorme peso de Jesús de Rosario. A poemas de Cirlot sonaron los floreos de la guitarra de “Paquete”, cuyo nuevo álbum habremos de comentar pronto y que le acompañó por malagueña. Una cuadrilla, en fin, compacta y rebosante de torería, completada por el plateado quejido de “Rafita” en los coros, la percusión de Antón Suárez y el contrabajo de un Yelsy Heredia de brillante fraseo.
Desde sus asientos de primera fila, Ramón “El Portugués” —¡atentos a su recital de diciembre!- jugueteaba con el pomo del bastón y Juan Maya pergeñaba su próximo relato. Fuera, en la noche oscura, el murmullo de la lluvia plateada descendía desde la “Guitarrería de Paquete” y el porche del “Patas” hacia el corazón del Lavapiés por cuyo empedrado pasearan “Camarón”, “Estampío” y Tina de “Las Grecas”. Y, en el aire, tejiendo los sueños artísticos de todos, del ayer y del hoy, vibraba el quejido solearero de “Guadiana”…
El cantaor Guadiana actúa en Tablao Cordobés acompañado
del virtuoso de la guitarra David Cerreduela. JUNIO 2012.
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