Del toro al infinito: Fundación Diario Madrid: Juan Lamarca y Federico Arnás en el cuarto coloquio del ciclo "Historias de San Isidro"

miércoles, 21 de mayo de 2014

Fundación Diario Madrid: Juan Lamarca y Federico Arnás en el cuarto coloquio del ciclo "Historias de San Isidro"

Ricardo Días Manresa, Federico Arnás, Juan Lamarca y Antonio Campuzan0

"...Un poso de nostalgia quedó sobre la mesa de ponentes cuando Arnás recordó los inicios de información taurina comparados con calidades más "ligeras" de la actualidad..."

Juan Lamarca y Federico Arnás protagonizaron el cuarto coloquio del ciclo que organiza la Fundación Diario Madrid

Lamarca estimó imprescindible, para la pervivencia de la esencia y pureza de la corrida, que se haga patente la actitud de exigencia del público y de crítica de prensa, y aunque ello ha bajado de intensidad en la plaza de las Ventas, esta debe seguir manteniendo su carácter de máximo tribunal del toreo.

Paco Delgado

Juan Lamarca, veintidós años primera autoridad del coso venteño y ocho delegado gubernativo, constituye por sí mismo una categoría relacionada indiscutiblemente con la los toros en Madrid, en el último tercio del siglo XX. El presidente reconoce su vinculación al toreo como un "eje de mi vida".

"El público de las Ventas -continúa- no tiene que ser deudor de una actuación redonda, lo es en detalles, fragmentos, que pueden hacer que el público rompa como no se pude imaginar".

A preguntas del moderador Díaz Manresa, Lamarca considera que "el lugar del presidente es uno de los mejor ubicados en la plaza. Eso sí, no se puede uno distraer en su atención, todo es interesante para la evaluación de una tarde de toros". La colaboración de los toreros con la actuación presidencial no resultó ajena al enjuiciamiento de representante presidencial:

"Espartaco fue, sin duda alguna, el torero más respetuoso con los presidentes. Sobre todo en comparación con otros espadas que par suplir sus carencias desviaban el ambiente negativo de la plaza hacia el palco".

Lamarca estimó imprescindible para la pervivencia de la esencia y pureza de la corrida que sea patente la actitud de exigencia del público y de crítica de prensa, y aunque ello ha bajado de intensidad en la plaza de las Ventas, esta debe seguir manteniendo su carácter de tribunal del toreo.

El rasgo impecable en su actuación de Juan Lamarca quedó inmortalizado, a tenor de su discurso, por el hecho de dar comienzo una corrida a las siete en punto, sin esperar la llegada del Jefe del Estado, el Rey: "Con todos mis respetos, el Rey no podría molestarse y el espectáculo tenía que comenzar a su hora, como se predica de siempre".

Federico Arnás, el periodista emparejado con el invitado de esta cuarta sesión, se remontó a 1977 cuando se presentó en sociedad de la información taurina de la mano, precisamente, de Ricardo Díaz Manresa, en Televisión Española. Tras mencionar a su padre, novillero de ejercicio, recordó toros importantes lidiados, con dedicación especial al toro de Félix Cameno, en 1965, lidiado por Antoñete, antes de la culminación del toro de Osborne, un año después. O el toro de Pablo Romero, por cuenta de Paco Camino. Un poso de nostalgia quedó sobre la mesa de ponentes cuando Arnás recordó los inicios de información taurina comparados con calidades más "ligeras" de la actualidad.