En medio de una escasez de divisas que impide la importación de insumos médicos, las amputaciones de piernas han aumentado en los centros de salud del país por la falta de equipos y suministros necesarios para atender estos casos.
Hasta la fecha los distribuidores de equipos médicos adeudan 350 millones de dólares a sus proveedores internacionales, por lo que las líneas de crédito fueron cerradas y los inventarios de algunos rubros llegaron a cero.
En un informe que entregó la Asociación Venezolana de Distribuidores de Equipos Médicos, Odontológicos, Laboratorios y Afines (Avedem) a la Asamblea Nacional se advierte que en el país “más de 900 amputaciones de miembros inferiores se realizan en los hospitales”. Sin embargo, “lamentablemente en los últimos meses un mayor número de amputaciones se han realizado en estos centros, dejando pacientes en estado de minusvalía que se ha podido evitar”. Todo por una razón: falta de Stents Periféricos, un equipo necesario para salvar miembros inferiores.
Lo mismo ocurre con los marcapasos. En los últimos cinco meses se han dejado de colocar 750 unidades, “afectando el mismo número de pacientes, con el potencial riesgo, al no realizarle este procedimiento, de fibrilación auricular, arritmias cardiacas y eventualmente la muerte”, se lee en el documento.
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