"...Venir al más grande, recalar en el once veces campeón de Europa, compartir vestuario con Cristiano, Bale, Ramos, Benzema, Pepe, Kroos y compañía, no sólo no debe incrementar el precio de un futbolista sino que tendría que reducirlo; aquí el prestigio no lo pone el jugador, lo pone el club. Supongo que un buen representante sabe ver esas cosas. Probablemente Raiola sólo sea una máquina tragaperras andante..."
Raiola toma el dinero del United y corre
Anoche contaba Sergio Valentín en El Primer Palo que el Real Madrid había decidido abandonar la puja por Paul Pogba por una cuestión económica. Pensaba añadir "por una simple cuestión económica", pero el caso es que el fichaje del todo campista francés puede ser de todo menos simple: no es simple la cantidad de dinero que, al parecer, está dispuesto a poner el United de Mourinho por él: 120 millones de euros; tampoco es simple el representante del chico, el tristemente conocido Mino Raiola, una bomba de racimo humana; y, por último, no es simple el propio jugador. Si, tal y como anunciaba ayer por la noche L'Equipe, la operación está cerrada con el club inglés, Pogba se convertirá en las próximas horas en el fichaje más caro de la historia del fútbol, así que la cuestión no tiene nada de simple. Si Zidane se hubiera cerrado en banda por Pogba, Florentino Pérez habría tirado la casa blanca por él, pero tampoco es el caso.
Tal y como se está poniendo el fútbol, y con la Premier con más pasta fresca que nunca, el Real Madrid está inevitablemente abocado a detectar bolsas semiocultas de nuevos jugadores, futbolistas muy jóvenes y con gran proyección de futuro. Pero el caso es que también empiezan a pagarse cantidades astronómicas de dinero por futbolistas cada vez más tiernos: el United pagó 80 millones por Martial, que tiene 20 años, mientras que Renato Sanches, que parece confirmado que tiene 18, acaba de fichar por el Bayern por 35 millones más otros 45 en variables. Por Pogba, que tiene 23, está dispuesto a pagar 120 millones el United, y André Gomes, que tiene 22, podría salirle al propio Real Madrid por 60. Así las cosas, hay que apostar por los Martin Odegaard, Marco Asensio o Sergio Díaz, que tienen 55 años entre los tres.
Sucede también que, a la hora de negociar, lo que para otros vale X para el Real Madrid vale X+Y, cuando en realidad, y si nos paramos a pensarlo bien, debería ser todo lo contrario, y me explico: con 22 añitos, un futbolista del corte de Pogba, que por edad no está ni muchísimo menos ante su último gran contrato, debe decantarse por el proyecto deportivo más que por el económico; el United es indudablemente un grande, y con Mourinho al frente va a ser más competitivo que nunca, pero cualquier equipo del mundo, cualquiera, está un peldaño por debajo del Real Madrid. Venir al más grande, recalar en el once veces campeón de Europa, compartir vestuario con Cristiano, Bale, Ramos, Benzema, Pepe, Kroos y compañía, no sólo no debe incrementar el precio de un futbolista sino que tendría que reducirlo; aquí el prestigio no lo pone el jugador, lo pone el club. Supongo que un buen representante sabe ver esas cosas. Probablemente Raiola sólo sea una máquina tragaperras andante.
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