la suerte suprema

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Pepe Bienvenida / La suerte suprema

lunes, 26 de mayo de 2025

MADRID / 15ª SAN ISIDRO.- A bravura, valentía / por Jorge Arturo Díaz Reyes

Diego San Román se dobla con "Comisario". Foto: Las Ventas

Valerosos; Román corta la oreja de un bravo y el confirmante mexicano Diego San Román la pierde con otro. Curro expone sin fruto ante dos mansos. Armadísimo encierro de Gallardo…

A bravura, valentía

Jorge Arturo Díaz Reyes
CrónicaToro/Madrid, 25 V 2025
Con armamento de largo alcance llegó la corrida de Fuente Ymbro. Qué caras, que agujas. Cinqueño, solo uno, el cuarto. Pero muy bien presentados en sus 566 kilos promedio. Los tres primeros mansos, y sosos, bronco el cuarto. Pero el quinto, “Comisario”, castaño, número 56 de 566 kilos, recibido a palma batiente, qué toro, que imponencia, que raza, cuanta exigencia y cuánto costaba no solo ponerse frente a ella sino quedarse allí. Román lo hizo, tragando mucho. No había otra manera. Las primeras cuatro derechas genuflexas y los dos de pecho, con cambio de mano y de pitón fueron una declaración mutua de guerra.

Luego el valenciano, más allá de los medios citando de muy largo lo ve llegar pronto, al codicioso galope mostrando la casta para zurcirle cuatro en redondo y el forzado. Y así por cuatro veces. La segunda casi de tercio a tercio. Como César Rincón hace veinte años con aquel Torrestrella de su reaparición en este ruedo. Torear para el toro, lidiar dando la ventaja, sin florituras ni flamenquerías. El toro exigía mando firme, y cantó la cogida dos veces. A la tercera fue la vencida. La cogida con el hombre en la arena entre sus agujas. Las ayudas tardaron por la distancia. Y al final, de milagro, ambos indemnes. La réplica fue por naturales fajados de alto costo e impacto público. La faena era de verdad verdad cuando tras el pinchazo contrario y bajo, la media estocada pasada derribó al bravo. Ahora la cosa era por la oreja. Una petición mayoritaria y furiosa, como la faena, obvió la imperfecta ejecución de la suerte suprema, y don José Antonio Rodríguez San Román con la espalda contra la pared de su augusto palco, optó por premiar la brega y el valor. En verdad no hubo objeciones y después de la gran ovación al arrastre, al pasar el torero frente al siete, todo era mundo pendiente le aplaudieron. También tienen su corazoncito. Eso dice mucho.

El confirmante mexicano Diego San Román salvó su efeméride con honor. Dos problemas a resolver le tiraron. Un manso rajado, el de la ceremonia, “Infortunado” (preciso nombre), con el cual atinó a presentarse con un florido quite que fue un ¡Viva México! De largo, una saltillera, dos gaoneras, una fregolina y una brionesa. Capote de su tierra, toreros de su tierra. Lo demás fue apostar sin esperanza frente a las renuncias defensivas del malo. La limpia y colocada estocada firmó, y el saludo discreto, pero justo marcó la fecha.

El muy encastado y exigente sexto, “Judío”. Bravo también, fue una prueba ácida para el recién aceptado. Reyna no pudo con él en varas, y le dijeron de todo. En cambio, Gallego y Herrera se metieron con los palos al área de candela, sobre todo Gallego poniendo la gente a gritos. La faena fue a lo mero macho, de tandas cortas pero embrocadas, de cara o sello. De te mando o me cogés. Las embestidas inciertas eran un albur y Diego aguantaba, pasándoselas por la piel. Reconocimiento masivo. Tampoco este andaba para languideces, mano caída o desmayos. Lo que exigía era toreo macho y lo encontró. Si la espada fulminante, pero delantera (mucho), hubiese caído en sitio, la oreja pedida por la minoría también hubiese caído. Pero no.

Por su lado, Curro Díaz, tan esperado, pareció haber venido solo a cumplir su papel de padrino en la ceremonia. La presencia y los dos últimos toros de Gallardo salvan su cartel en Madrid.
  • FICHA DEL FESTEJO
Domingo 25 de mayo 2025. Madrid, Plaza de toros de Las Ventas. Sol. Más de tres cuartos de entrada. Seis toros de Fuente Ymbro, muy armados, bien presentados de juego diverso.

Curro Díaz, silencio y silencio.

Román, silencio y oreja.

Diego San Román, saludo y saludo tras petición.

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