"..Vicente Barrera, hombre de la Cultura en Valencia por su carrera y, ante todo, por su condición de matador de toros que, por supuesto sabe que los toros son Cultura, pero con la mayor extensión de la palabra, razón por la que desde los presupuestos de la Generalitat Valenciana ha destinado trescientos mil euros a la Fundación Toro de Lidia antes citada.."
Ovación para Vicente Barrera, tras su gran «faena al toro» de la Cultura
Pla Ventura
Toros de Lidia/3 noviembre, 2023
Todos los que tildan a Vox como partido ultraderechista deberían de callar la boca o, en su defecto, analizar lo que estas personas hacen en sus gobiernos respectivos, es el caso de Vicente Barrera en el gobierno de Valencia en que, dada su condición como vicepresidente de la Generalitat Valenciana y responsable de la Cultura de dicho gobierno, no ha dudado un instante en favorecer a la Fundación Toro de Lidia, ese ente capitaneado por Victorino Martín que, tanto bien le está haciendo a la Fiesta con mayúsculas.
Vicente Barrera, hombre de la Cultura en Valencia por su carrera y, ante todo, por su condición de matador de toros que, por supuesto sabe que los toros son Cultura, pero con la mayor extensión de la palabra, razón por la que desde los presupuestos de la Generalitat Valenciana ha destinado trescientos mil euros a la Fundación Toro de Lidia antes citada. Este dato nos viene a mostrar que, los hombres y mujeres de Vox, tan temidos por la basura esperpéntica de los partidos de izquierdas que les califican como si fueran terroristas de Hamás, en realidad son personas afines a la cultura, al bienestar social, a la paz y la concordia como ha demostrado Vicente Barrera desde la posición política que ocupa.
El diestro valenciano, -porque lo toreros lo son siempre-, podía hacerse el loco al respecto de la Fundación Toro de Lidia pero, sabedor de la gran causa del arte, no ha dudado un segundo en echar una mano a algo que huele a Cultura por todos los costados, en este caso, la promoción de muchos novilleros y matadores de toros como es el caso de la Copa Chenel en la que cada año organiza dicha Fundación.
La diferencia política entre Vicente Barrera y el noventa por ciento de los políticos actuales es que, a Barrera no le hace falta un sueldo público porque su capacidad como torero antes y como empresario y letrado más tarde, lo que pueda cobrar del erario público puede ser calderilla mientras que, decenas de bandarras sin el menor atisbo de cultura, gentes sin oficio ni beneficio, ni de educación, ni de amor a España, viven opíparamente sin saber hacer la o en un canuto como antes se decía y ahora se demuestra. Una prueba más si de toros y Cultura hablamos puesto que, mientras Vicente Barrera se ocupa de ambas cuestiones siendo de derechas, mientras que un animal de izquierdas como el presidente de la Diputación de Zaragoza, no concede ni los premios que toda la vida de Dios ha otorgado dicha Diputación a los triunfadores de la feria.
Pongamos un ejemplo al respecto de este diestro y, entre otras políticas a Irene Montero e Ione Belarra. ¿Qué saben hacer estas pajarracas? Absolutamente nada pero, como han confesado, están “trabajando” para que la Infanta de España no llegue nunca a reinar y, por eso semejante “trabajo” de nuestros impuestos les pagan decenas de miles de euros por hacer daño, por atentar contra España, contra la monarquía y, por supuesto, por todo aquello que huela a bienestar. La desgracia de la política es que, cualquier gandul asqueroso puede llegar a ministro y si es de izquierdas y maricón, todavía lo tiene más sencillo. Queda claro que, personas como Vicente Barrera son las que ridiculizan a estas gentuzas nombradas que, mucho progresismo, para ellos/as, pero los inocentes que les han votado que se mueran de hambre. Esa la política actual.
Como valenciano me cabe el honor de darle las gracias al diestro valenciano Vicente Barrera que, entre otros muchos logros que está llevando a cabo en su gobierno, entre ellos, eliminar a decenas de gandules que había contratado Ximo Puig como palmeros personales, mandarles todos al paro y, si quieren comer que trabajen, como hacemos todos los españoles de ley. Y no quiero pensar en la felicidad que estará sintiendo Victorino Martín García como presidente de la Fundación Toro de Lidia al ver la generosidad de Vicente Barrera, en este caso, de la Generalitat Valenciana. Tras semejante “faena” de Barrera al toro de la Cultura, en realidad se merece las “orejas y el rabo”, triunfo que tantas veces consiguió vestido de luces.
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