"...lo que sucede es que la relación entre la empresa (principalmente la familia Chopera) y la afición, hoy por hoy está más rota que nunca. No hay conexión con la afición y por más intentos de cambio y promoción que han intentado implementar, los resultados son cada vez más negativos. A esta complicada situación, hay que agregarle la ausencia de la televisión (One Toro) y las campañas de odio que promueven algunos grupos antitaurinos en la región. .."
Feria de Bilbao 2023, perdidas económicas y estampas desoladoras por la falta de espectadores.
El País Vasco, en donde la cultura y la tradición se mezclan con la modernidad, la tauromaquia que durante años fue sinónimo de pasión y fervor parece estar muy herida tras el final de las corridas generales 2023. La entrada para la sexta corrida de abono de la feria de Bilbao, ha dejado una estampa desoladora: casi más toreros que espectadores en el tendido.
Haciendo a un lado la entrada del pasado sabado 26 de agosto cuando se congregó mas gente en la plaza (tres cuartos largos de entrada) en el resto de los festejos, la mayoría de las modernas gradas de la plaza sé vieron desocupadas durante todo el serial. Esta escena, era impensable hace unas décadas cuando las corridas generales congregaban una buena cantidad de público no solo de España, sino también de otras partes del orbe taurino.
Hay muchos factores que analizar sobre esta situación, pero algunos aficionados se quejan de que los precios de las entradas son demasiado caros, otros que el formato de la feria ya caducó y que se necesitan hacer cambios en su programación, mientras que los más radicales, piensan que es el reflejo de un cambio cultural en la sociedad bilbaína.
Lo que es una realidad es que no se puede negar el impacto económico que esta situación está generando. Las pérdidas para la empresa son enormes. Organizar una corrida de toros implica una inversión significativa y con las entradas que se registraron en la mayoría de los festejos, recuperar esa inversión se vuelve una misión imposible, ya que ni siquiera Morante de la Puebla y Roca Rey fueron capaces de meter tres cuartos de plaza cuando estuvieron acartelados juntos.
Ante este panorama, la pregunta que surge es: ¿Estamos presenciando el final de la tauromaquia en Bilbao?
Por supuesto que no, lo que sucede es que la relación entre la empresa (principalmente la familia Chopera) y la afición, hoy por hoy está más rota que nunca. No hay conexión con la afición y por más intentos de cambio y promoción que han intentado implementar, los resultados son cada vez más negativos. A esta complicada situación, hay que agregarle la ausencia de la televisión (One Toro) y las campañas de odio que promueven algunos grupos antitaurinos en la región. Pero la realidad es que la principal razón por la que el público de Bilbao se ha alejado de la plaza, es por cuestiones que tienen que ver estrictamente con temas taurinos. El día que estos temas se solucionen, el público seguramente regresará a los tendidos como ya ha pasado en otros sitios, en donde la tauromaquia ha resurgido cuando muchos la daban por desahuciada.
Lo que es seguro es que el debate continuará, y la sociedad bilbaína tendrá la última palabra. /De Sol y Sombra/
--
Relacionado: Bilbao: off line / por Jorge Arturo Díaz-Reyes
Las razones apuntadas en este artículo sobre la ruina de la Fiesta en el País vasco pueden que sean parte de la causa de la misma, pero lo que es evidente es que el odio a España y el afán de separatismo por la acción política corrosiva hace que las instituciones y medios hayan ido abandonando incluso persiguiendo a la causa taurina en aquella región, otrora gloriosa como parte de España. Son las mismas causas que las de Cataluña. La Fiesta es un símbolo de identidad y vínculo de unidad entre españoles. España ha sido entregada a sus enemigos durante estos últimos años (los de la falsa democracia que padecemos) y como consecuencia los toros pagan las consecuencias. Si algún día Cataluña y el País vasco vuelven a ser España pues la Fiesta volverá también en todo su esplendor confiando que, para ese soñado día, los taurinos y su mafia profesional no
ResponderEliminarhayan a acabado ya con las corridas de toros.