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Pepe Bienvenida / La suerte suprema

martes, 11 de julio de 2023

Pamplona: “Si tienes un hijo subnormal mételo a Policía Nacional” / por Carlos Bueno

 Pamplona

"...Este año, miembros de las peñas colocaron una gran pancarta en favor de los asesinos criminales de la banda terrorista ETA durante la celebración de la primera corrida, al tiempo que dedicaban insultos a la recién elegida alcaldesa de forma democrática. Durante la salida a hombros de un matador, algunos indeseables lanzaron basura al espada mientras abandonaba el coso por la puerta grande. No, lo que ocurre en la capital navarra no es representativo de la realidad de la tauromaquia..."

“Si tienes un hijo subnormal mételo a Policía Nacional”

Carlos Bueno
Burladero/11 de julio de 2023 
Durante la semana de fiestas, la población de Pamplona pasa de 280.000 habitantes a más de un millón. Lo que ocurre en la capital navarra en San Fermín es un caso único, sin parangón y no representativo de la realidad de la tauromaquia más allá de la Comunidad Foral entre el 7 y el 14 de julio de cada año. Un dispositivo formado por cien profesionales y más de 30 cámaras de Televisión Española llevan las imágenes de los encierros matutinos a todo el mundo. Al frente de la programación especial varias caras de amplias sonrisas y gran desparpajo que no saben diferenciar un Saltillo de un Atanasio, que no distinguen a Juan Pedro Domecq de Ricardo Gallardo, que no saben quién es Román ni Fernando Robleño; expertos en diseccionar las carreras de los mozos junto a los astados, pero incapaces de hacer un guiño a las corridas de cada tarde sin las cuales no existirían los encierros ni la ocupación de la ciudad se multiplicaría por cuatro.

La llamada del toro consigue inundar las calles pamplonicas de personajes ávidos de fiesta. De ellos, casi 20.000 llenan el coso taurino día tras día, pero a la mayoría les da lo mismo quiénes toreen y cómo toreen. La Casa de Misericordia, organizadora de este evento singular, paga mejor que nadie a los toreros; ese es el motivo de que no suela faltar casi nadie de los requeridos. Las charangas no cesan de tocar durante el festejo. 

Los cánticos se suceden: 

“Si tienes un hijo subnormal, no lo dudes más, mételo a Policía Nacional”, 

dice uno de ellos, que se corea aunque un coletudo ingrese en la enfermería con una cornada. Hay quienes cocinan en los palcos. En la zona de sol nadie mira hacia el ruedo, y muchos concurrentes están de espaldas a él.

Este año, miembros de las peñas colocaron una gran pancarta en favor de los asesinos criminales de la banda terrorista ETA durante la celebración de la primera corrida, al tiempo que dedicaban insultos a la recién elegida alcaldesa de forma democrática. Durante la salida a hombros de un matador, algunos indeseables lanzaron basura al espada mientras abandonaba el coso por la puerta grande. No, lo que ocurre en la capital navarra no es representativo de la realidad de la tauromaquia. Puede ser que le venga bien a nivel de promoción, pero nada tiene que ver con el respeto inherente al toreo.

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